Impactan mucho las imágenes de edificios protegidos de todas las maneras posibles arrasados a la llegada de un tsunami a la costa.Algo así es la sensación que le queda a prácticamente cualquier equipo que visita el Palau Blaugrana para disputar un partido de balonmano y este martes le tocó al Abanca Ademar.
Porque lo cierto es que firmó un buen partido el equipo de Rafa Guijosa, pero eso no es ni mucho menos suficiente para ganar a este F.C. Barcelona. Un equipo que puede anotar de todas las maneras imaginables, llevando cada partido a un ritmo insostenible que, en caso de duda, termina ahogando al rival. Pese a ello, aguantó el equipo leonés media hora tras una sensacional primera parte que le llevó incluso a ponerse por delante en el marcador en el inicio de la segunda, a partir de ahí solo hubo un equipo sobre la cancha.
El parcial de 7-2 de inicio lo supo remontar el Ademar, que llegó a ponerse por delante tras el descansoY eso que amenazó el inicio de partido con que los pocos periodistas que siguen la actualidad de la sección de balonmano del F.C. Barcelona dejasen, otro día más, la crónica hecha en el entretiempo. Porque perder balones en el Palau es hacerse el ‘harakiri’ y eso fue lo que comenzó haciendo el Abanca Ademar. El infernal ritmo al que llevaba el partido nada más comenzar el conjunto blaugrana les permitía a los de Xavi Pascual anotar una y otra vez bien en la transición, bien en el contraataque, llegando a los primeros cinco minutos de juego con un 7-2 en el marcador que presagiaba un correctivo que Rafa Guijosa no estaba dispuesto a consentir.
Porque el técnico madrileño paró el partido y metió por fin a sus hombres en el partido aunque la ventaja llegara a ser de 7 goles (9-2) inmediatamente después. Un parcial de 2-7 que coincidía con la entrada de un sensacional Juanín y la exclusión de un intratable Dika Mem permitía a los leoneses volver a competir ante un Barça al que no le sentó bien el carrusel de cambios y comenzaba a tener problemas ante la defensa ademarista. Porque encontró fluidez en el ataque el equipo leonés con Acacio dirigiendo logrando que llegaran balones tanto al extremo como al pivote y especialmente a un lateral zurdo destacado tanto con Vieyra como con David Fernández.
No le gustó cómo pintaba la cosa a Xavi Pascual, que pidió tiempo muerto con su equipo 2 arriba tras desperdiciar Acacio un contraataque para ponerse a 1 solo gol muchos minutos después del inicio. Pero no cambió la cosa y al Abanca Ademar tampoco se le atragantó el 5-1 propuesto por el técnico local, limando la ventaja hasta llegar incluso con balón para ponerse por delante antes del descanso, si bien Moller detuvo hasta en dos ocasiones los lanzamientos de David Fernández.
Tras una gran primera parte, el Barça se marchó ya en la segunda si bien los leoneses no perdieron la cara al partidoFue un presagio de lo que ocurriría en la segunda parte, a pesar de que el equipo leonés logró ponerse por delante nada más comenzar ese segundo acto gracias a un gol del lateral zurdo. Fue un espejismo porque ahí apareció Dika Mem para volver a percutir la portería leonesa y eso, unido a la genial actuación de Moller en la rival permitió volver a abrir brecha al Barça poniendo ritmo de crucero hacia la victoria alejando cada vez más y más al Abanca Ademar en el marcador.
Llegó a lograr el equipo blaugrana de nuevo una ventaja de 6 goles , pero no le perdió la cara al partido el equipo leonés ya hasta los minutos finales. De hecho, logró remontar el Ademar hasta los 2 goles (26-24) si bien un par de errores y la exclusión de Acacio volvieron a alejar al Barcelona en el marcador hasta unos minutos finales en los que entonces sí, los de Rafa Guijosa pensaron en la final del sábado en Polonia ante el Wisla Plock.
A golpe de contraataque el F.C. Barcelona remató un partido que reflejó finalmente en el marcador más diferencia de la que seguramente hubiera sobre el 40x20.
Sin duda le servirá como impulso la buena imagen dejada en el Palau Blaugrana a pesar del resultado a un equipo que sabe que manteniéndola, estará muy cerca de darse una alegría el sábado en Plock y es que cuando solo se pueden sacar conclusiones positivas de una derrota es que el camino es el correcto.