No es nada fácilvenir a sustituir a alguien ya contrastado en el balonmano internacional como es Vladimir Cupara. Y menos si tienes 25 años, es el reto más importante de tu carrera y ocupas una posición tan determinante y visible como la de portero. Por eso, Dino Slavic va a tener muchos ojos puestos desde el inicio en su persona. Y por ello, verle a un nivel tan extraordinario, aunque sea en pretemporada y ante un rival de categoría inferior, es una grandísima noticia para el Ademar.Y es que, de un partido con tan poca historia por la diferencia de nivel entre ambos equipos como era la semifinal de la Copa de Castilla y León entre los leoneses y el Zamora de Plata, la exhibición del portero es uno de los datos más salvables que se puede rescatar.
¿El choque en sí? Nunca tuvo historia. 33-19 acabaron ganando los leoneses, colándose en la final de este domingo a las 18:30 horas. Lo hicieron tras arrancar el partido con un 7-1 en los primeros nueve minutos que dejó claro que no iba a haber color, y llegando al descanso ya con 11 goles de diferencia después de que los leoneses marcaran 21 tantos en unos primeros 30 minutos en los que el ataque fue imparable.
Se les vio muy sueltos en el lanzamiento exterior a Juanjo Fernández y Vieyra, además de muy acertado desde el extremo a Juanín, y se pudo apreciar, quién sabe si en una solución de emergencia por la que Guijosa podría llegar a optar en algún momento de la temporada, a José Mario Carrillo jugando de extremo zurdo y haciéndolo bien.
El Abanca Ademar, que jugó sin Mario, Mosic ni David, jugará la final este domingo a las 18:30 horas Y es que no jugó Mario López, que ‘tocado’ se unió en la lista de ausentes al lesionado David Fernández y a un Mosic que está en su país solucionando un problema burocrático.
¿En la segunda parte? Con el marcador a favor la relajación hizo acto de presencia en los leoneses a la vez que el Zamora, pese a sufrir numerosas exclusiones, apretaba para evitar un resultado muy doloroso, por lo que el panorama cambió. Dejó de ver puerta tan fácil ante la mayor dureza zamorana el Ademar y, si la diferencia aumentó aún así algo más, fue porque para el rival Slavic fue un muro que sólo recibió cuatro goles en los 25 minutos que jugó.
Al final, minutos para los jóvenes Teijón, Rozas y Espinosa (estos dos últimos con las camisetas de Vejin y Mosic) y 14 goles de diferencia en un test que sirve de aperitivo para el más serio que hoy afrontarán con el Valladolid en un derbi que nunca entiende de amistosos.