Intercambio solidario de calcetines en las Discípulas de Jesús

Este lunes por los pasillos del Colegio Discípulas de Jesús todas las miradas se dirigían hacia el suelo. Y es que el alumnado de este centro educativo de la capital leonesa puso en marcha una iniciativa solidaria en la que los calcetines fueron los protagonistas. Con unas prendas desemparejadas, los estudiantes quisieron dar visibilidad a la diversidad y "concienciar a la sociedad de la importancia de procurar y velar por el bienestar de todos".

En las Discípulas de Jesús colaboraron así en la campaña 'Ser diferentes es algo muy común', puesta en marcha por la empresa 'Carocho'. Los alumnos y profesores llevaron ayer calcetines desemparejados de la marca, incluso algunos se atrevieron a intercambiarlos a lo largo de la mañana, con el fin de hacer ver que ser diferentes no implica no poder caminar al mismo tiempo.

Esta iniciativa solidaria de 'Carocho' trabaja para "dar visibilidad y apoyo económico a fundaciones que desarrollan labores de integración e investigación de distintas discapacidades". Una forma de solidarizarse con las capacidades diferentes y de hacer ver a los más pequeños la necesidad de colaborar para superar las diferencias.

En esta ocasión, desde 'Carocho' quisieron donar 300 pares de calcetines al Colegio Discípulas de Jesús, para que profesores y alumnos pudieren intercambiar sus calcetines en el Día Mundial del Síndrome de Down. Una iniciativa que llegó desde los más pequeños hasta cursos más avanzados y que demuestra que, en cuestiones solidarias, este es un centro educativo que se viste por los pies.