El que tuvo lugar este Miércoles Santo en el patio de El Albéitar es un acto sencillo, íntimo, realmente emotivo y un ejemplo significativo de la labor social que ejerce la Cofradía del Santo Cristo de la Bienaventuranza. Como vienen haciendo desde el año 2019, los hermanos de San Claudio encendieron un cirio en la tarde del Miércoles Santo, rubricado con el lema ‘Dona Vida’, a modo de ofrenda a los trasplantados y con el objetivo de fomentar la abnegada acción social que supone la donación de órganos.
Este acto, cargado de solemnidad, se celebró quince minutos antes de las ocho de la tarde en el interior de la carpa que custodia los pasos hasta su salida procesional en la mañana del Jueves Santo. La junta de seises de la cofradía, junto a un gran número de hermanos, dio fe del encendido del cirio, que procesionará en el trono del Cristo de la Bienaventuranza, conocido popularmente como el 'Moreno'.
Cada año la cofradía elige a dos personas trasplantadas para encender el cirio y, en esta ocasión, las encargadas fueron dos hermanas de la cofradía, madre e hija. Carmen y Marlena, visiblemente emocionadas, procedieron a dar luz al cirio, tras unas palabras del consiliario de la cofradía y la abadesa. La Agrupación Musical de la Bienaventuranza interpretó, a continuación, la marcha ‘La luz de la esperanza’, con la que concluyó el acto.
Esta campaña cofrade del ‘Dona Vida’ de la Bienaventuranza fue heredada de Sevilla, pues la iniciativa llegó hasta la penitencial leonesa de la mano del director general de transplantes del Colegio de Médicos de Sevilla, en una visita que realizó la Agrupación Musical de los de negro y azul. La donación de órganos está estrechamente ligada a la formación que lidera Sergio de Juan, pues afecta de lleno dos de sus integrantes, que no son otras que la madre y la hija que encendieron este año el cirio de vida, trasplantadas de riñón. Gracias a ello, pueden seguir viviendo la vida y contándola en Semanas Santas tras los pasos del ‘Moreno’ de la Bienaventuranza.
La abadesa de la cofradía, Milagros Blanco, explicó a La Nueva Crónica antes del acto el sentido de este emotivo acto, que significa «unidad», porque «todos lo podemos necesitar». «Es importante recordar la importancia de dar sin recibir nada a cambio», añadió. El Cristo de la Bienaventuranza, este jueves –si el tiempo lo permite– llevará ese cirio de vida y, por lo tanto, «tendrá un poquito de cada uno de los trasplantados» en su caminar ante los leoneses.