La preparación de todo el trabajo la realizó Mónica a través del fotógrafo Andrés de la Torre, quien confecciona hermosos calendarios para Amidown con muchachos y muchachas con síndrome de Down todos los años y tiene relación con ellos. Él le pasó además las fotografías de los jóvenes para que fuera trabajando con ellas y así lo hizo, le concedieron los permisos para realizar sus obras y, sin conocerlos, fue realizando sus retratos. Como Mónica nos cuenta: «elaboro un proyecto que consiste en dar visibilidad a algo que no es fácil ver en redes sociales, museos y otros sitios públicos. Se trata de normalizar algo que no estamos acostumbrados a ver».
Tras realizar la obra, el ‘Proyecto 21’ comenzó su andadura en Madrid, coincidiendo con la Feria de Arte Contemporáneo, donde fue muy visitada y tuvo una buena acogida. Ahora llega a León, de donde son los jóvenes retratados. Su forma de acercarse a ellos es en un primer momento a través de la mirada y ello se refleja en la serie en la que presenta varias cajas con los ojos de muchachos y muchachas que contemplan a la artista. La presentación de esa serie la hace en cajas de madera tratada en las que sobresale el rectángulo que ocupan los ojos dibujados en acuarela.Además de ello se pueden ver seis obras en gran formato realizadas mediante acuarela con sal en un soporte de papel algodón cien por cien, donde se puede comprobar la sencillez del trazo en el dibujo de esta autora para elaborar unos cuadros en los que el color se sobrepone al retrato dándoles una luminosidad cargada de vida.Hay una serie de retratos realizados en papeles diversos mediante transferencia, una técnica que ha utilizado la autora como novedad. Por último se pueden contemplar varios retratos monocromos realizados con pintura acrílica en tono cian elaborados a partir de las fotografías.
La interacción ha sido muy buena. «Me pasaron –nos dice– una lista con nombres de quienes querían participar en el proyecto y los seleccioné por nombres, en principio me parecía que no debía conocerlos por el tema de la protección de datos y por estar condicionada a la hora de trabajar, para hacerlo lo más objetivamente posible. Luego los he ido conociendo y ha sido una experiencia maravillosa».El resultado han sido unas acuarelas llenas de vitalidad en las que las miradas y el semblante de las personas retratadas muestra la sencillez, luminosidad, amabilidad y candidez de todos ellos carentes de malicia, retratos especiales diferentes a los retratos habituales.
Con esta exposición la autora espera dar visibilidad al tema y que la gente normalice al diferente, porque a veces vemos algo que se sale de los cánones que nos muestran las redes, lo que es considerado la normalidad y lo que intenta con esta exposición es que no nos provoque extrañeza, ni miedo ni inquietud.Sobre lo que significa esta muestra para ella y su trayectoria artística nos dice: «En mi proyección como artista me ha servido para indagar en nuevas técnicas, como la acuarela con la sal y la transferencia al papel. He tenido que trabajar mucho para que saliera lo que yo quería, pero al final ha sido muy gratificante».
Se trata de un proyecto organizado por la Asociación Down León- Amidown, con la colaboración de Fundos, Museo Casa Botines Gaudí y en el que además de la artista Mónica Alija ha participado el fotógrafo Andrés de la Torre.
La muestra estará expuesta hasta el día 4 de abril. Merece la pena contemplar la obra de esta excelente artista que da visibilidad a personas que debieran tenerla con total normalidad.