Sacar del barbecho el patrimonio del pueblo

Cuatro alumnas de la ULE lanzan proyectos para poner en valor la riqueza patrimonial de Igüeña, La Seca de Alba, Valdevimbre y Palacios de la Valduerna

Víctor S. Vélez
22/08/2022
 Actualizado a 22/08/2022
Las alumnas participantes en proyectos relativos de patrimonio dentro de las becas Ralbar. | L.N.C.
Las alumnas participantes en proyectos relativos de patrimonio dentro de las becas Ralbar. | L.N.C.
No cabe duda de que, en el mejor de los casos, la mayor parte del patrimonio del medio rural leonés está en barbecho. Para sacarlo de este ciclo de descanso y ponerlo en valor, la Universidad de León (ULE) ha elegido en el marco de las becas Ralbar los proyectos de cuatro de sus alumnas que quieren dinamizar la riqueza patrimonial de los pueblos de los que proceden.

Precisamente, ralbar viene a ser algo así como levantar el barbecho, comenzar a arar las tierras. Justo lo que se pretende con estas prácticas lanzadas por segundo verano consecutivo por la ULE y la Fundación Banco Sabadell. De forma más concreta, este es el objetivo de Valeria Rodríguez, Laura Cuesta, Elsa Cantón y Claudia Escurza, cuatro estudiantes que este verano están poniendo en marcha proyectos para dinamizar el patrimonio de Iguëña, La Seca de Alba, Valdevimbre y Palacios de la Valduerna.

Valeria es alumna del Doble Grado en Historia e Historia del Arte y, de la mano de este programa, está poniendo en marcha el proyecto 'Puesta en valor del patrimonio minero del municipio de Igüeña'. De este modo, está desarrollando rutas por el rastro que ha dejado el carbón en su pueblos. Se trata de "visitas sostenibles" de unas dos horas, que se pueden realizar caminando o en bicicleta, a aquellos puntos de la mina que son accesibles. "Son rutas de cinco a siete kilómetros pro lo que queda de la minería, que no es mucho pero que debe ser puesto en valor ya que ha sido lo que ha moldeado las formas de ida y la economía del municipio", explica esta estudiante universitaria.

Fotografías que son historia


La otra parte de la iniciativa de esta alumna de la ULE en Igüeña consiste en una exposición que será inaugurada el día 22 con fotografías "del ambiente minero y las explotaciones". Valeria ha realizado un inventario con las fechas, curiosidades y protagonistas que están detrás de cada una de las instantáneas que forman parte de la colección.

El inventario fotográfico quedará resguardado en el Ayuntamiento y también se habilitará una dirección web para su consulta. "Mis dos abuelos eran mineros, uno murió de silicosis por la mina, y mi bisabuela también trabajo lavando carbón. Estas becas son muy interesantes porque me dan la oportunidad de ayudar a dinamizar mi pueblo y de hacer algo por él. También estoy muy agradecida al Ayuntamiento de Igüeña por abrirme las puertas y ayudarme en todo lo que necesito", valora esta berciana apasionada de la historia y del arte.

'Reconstruir' la iglesia


Rescatar un patrimonio venido a menos también es el objetivo de Laura en La Seca de Alba, localidad del Ayuntamiento de Cuadros. Según relata la beneficiaria de esta beca Ralbar a este periódico, allí la iglesia fue derribada en los años 70, la estación a comienzos de este siglo, el molino dejó de funcionar y la ermita también experimentó diversos cambios hasta el punto de ejercer como consultorio. "Lo que quería es investigar lo que pasó. Cuando voy a otros pueblos lo que más me gusta es entrar a ver su iglesia, pero la del mío ha cambiado radicalmente", apunta esta alumna del Doble Grado en Historia e Historia del Arte.

De esta forma, Laura se puso manos a la obra a entrevistar a los vecinos de La Seca de Alba, comenzando por los más mayores, "de más de 80 y más de 90 años". En estos encuentros para la primera fase del trabajo preguntó por los recuerdos de cómo era la iglesia, sus santos y retablos, con el afán de 'reconstruirla'. Preguntas que llegaron al párroco de cuando esa primera iglesia del pueblo, que databa del año 906, fue derribada.

Al no encontrar demasiada información ni en el Archivo Histórico ni en la Catedral, Laura buscó otros tipos de fuentes como las fotografías de bodas y comuniones que le han ido prestando los vecinos de La Seca de Alba. "Por ejemplo, encontré una foto de mis abuelos el día de su boda en la que se ve detrás el retablo y era una iglesia preciosa. El objetivo es reunir estas imágenes antes de que sea demasiado tarde. A finales de mes montaremos una exposición fotográfica, que también tendrá vídeos de las entrevistas, en el centro cívico que se ha inaugurado en la antigua escuela", detalla esta universitaria.

Estudio de la iconografía


Un proyecto similar ha sido el emprendido por Elsa en Valdevimbre. Su trabajo está consistiendo en estudiar la iconografía de los templos de las siete localidades que conforman el municipio.

La primera fase en su beca Ralbar se desarrolló en el pasado mes de julio con el estudio pormenorizado de «las pinturas, esculturas y santos de las iglesias». Ahora, en agosto, ha pasado a organizar visitas guiadas por cada una de ella para explicar a los vecinos los secretos de los templos de su pueblo. "La primera visita fue en Palacios de Fontecha y estoy muy sorprendida porque fue mucha gente, que estuvo muy interesada en lo que les contaba e hicieron muchas preguntas", comenta Elsa.

Aunque algunas de las iglesias que ha analizado en profundidad son "de pueblos muy pequeños", Elsa asegura que "todas tienen aspectos interesantes". De esta forma, esta estudiante de Historia del Arte está contribuyendo a que en Valdevimbre valoren más que nunca su patrimonio religioso.

Un paseo virtual en 3D


Aunque no es originaria de allí, Claudia ha recalado este verano en Palacios de la Valduerna para llevar a cabo una catalogación y muestreo tridimensional del patrimonio histórico y artístico del municipio. Estudiante de Economía, forma parte de un grupo multidisciplinar que pretende recrear paseos virtuales por los principales activos del lugar.

En la primera fase de su proyecto, esta universitaria ha escaneado los monumentos y restos medievales del municipio. Así, conservan una torre y un muro del siglo XIV, un puente romano sobre el que cuesta actuar al estar cubierto de vegetación, una iglesia con pinturas tardorromanas o su ermita de San Roque.

El objetivo de Claudia y su equipo, que sí que tiene parte de sus orígenes en Palacios de la Valduerna, es crear nubes de puntos con las imágenes captadas para hacer "paseos virtuales en 3D" por el patrimonio. Una tarea que están poniendo en marcha junto a la asociación 'El embrujo de la Valduerna', que pretende dinamizar esta zona de la provincia. La intención es que los resultados de esta beca Ralbar se queden alojados en la web de esta agrupación vecinal y que, al finalizar todos sus trabajos, Claudia exponga los resultados obtenidos y haga de guía por esta recreación virtual de la historia de este municipio próximo a La Bañeza.

Estas cuatro estudiantes de la ULE muestran con estos proyectos el compromiso con su pueblo y cómo la juventud también se esfuerza por mantener vivo el patrimonio de sus lugares de origen, la memoria de quienes les precedieron. En lo que resta de verano, Valeria, Laura, Elsa y Claudia seguirán trabajando en estas iniciativas para dinamizar la vida social y cultural de sus municipios, levantando el barbecho.
Lo más leído