Angel Suárez 2024

Sufridos Reyes Magos

06/01/2024
 Actualizado a 06/01/2024
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Me dicen los Reyes Magos que este año su labor se ha visto dificultada porque muchos de los negocios en los que tienen que aprovisionarse de los presentes que la gente ha incluido en sus cartas se niegan a envolverlos para regalo. No suele suceder en las pequeñas tiendas llamadas de proximidad, en las que el sufrido autónomo sigue esforzándose por preparar hermosos paquetes, con lazo y todo, como toda la vida, y gratis, igual que el hostelero se esfuerza por regalar opíparas y suculentas tapas. Pero sí en esas cadenas de tiendas de ropa y productos cosméticos que se han apoderado del centro de las ciudades. 

Para empezar el sufrido cliente se las ve y se las desea para encontrar un dependiente que le haga caso. El sistema parece pensado para el autoservicio, como en esos bares con terraza en los que uno mismo tiene que hacer de camarero. Y a la hora de pagar, tras guardar una considerable cola, te anuncian que no te van a preparar tu compra para regalo y que como mucho, te ofrecen en sustitución del envoltorio una suerte de sobre con publicidad de la casa que te cobran aparte, además de la bolsa, claro.

Conste que no tengo nada contra estas cadenas, ni mucho menos soy de los que se meten con Amancio Ortega por haber hecho fortuna y por sus generosas donaciones al sistema público de salud y la lucha contra el cáncer. Pero el servicio es el servicio, y hay que reconocer que en esas cadenas resulta más que mejorable.

Me preocupa además que estos negocios se hayan apoderado del centro de todas las ciudades hasta hacerlas casi idénticas. Da igual que uno viaje a Málaga, La Coruña o Albacete, siempre habrá una calle central poblada por los mismos negocios y escaparates que la avenida Ordoño II.

Ciertamente cada vez tiene menos sentido callejear por las ciudades que visitamos, porque se diría que todas se están convirtiendo en la misma. Si queremos ver en ellas algo que merezca la pena, no nos queda más remedio que limitarnos a sus monumentos, y a ninguno de menos de dos o tres siglos de antigüedad ¿Es que la modernidad es incapaz de crear algo original, bello o airoso? Pero este un tema para otra ocasión, hoy les dejo ya que toca recogerse pronto, corro el riesgo de encontrarme con los Reyes Magos y que no me traigan nada.

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