Pablo Álvarez Fernández: «Un compromiso, su tierra»

En el artículo de la última semana, titulado ‘Sueño cumplido’, yo me comprometía con mis lectores a comentar hoy los resultados de la entrevista que tenía concertada con el futuro astronauta leonés, Pablo Álvarez. Confieso que no estaba nervioso por la entrevista en sí, aunque era la primera vez que hacía de reportero . Lo único que me preocupaba era si realmente él me llamaría por teléfono y si Pablo ‘daría juego’ y respondería a mis preguntas con brillantez o si tenía que sacarle la información ‘a gancho’. A la hora en punto sonó el teléfono. Y Pablo ‘daba juego’, por supuesto que daba juego. Estuvimos casi una hora de tertulia amena y muy agradable. El resultado fue que se acumuló demasiada información, catorce páginas, y ni resumiendo ‘a tope’ pudimos evitar que se perdieran más de la mitad de los datos. En la redacción de La Nueva Crónica lo hicieron ‘de lujo’, pero todo no podía entrar en las dos páginas completas que salieron. En el artículo de hoy voy a tener la ocasión de informar a mis lectores de algunas notas o referencias de la entrevista que no pudieron salir en el reportaje. Allí, lógicamente se centraron en el núcleo de la entrevista y cortaron el principio y el final. En eso precisamente voy a centrarme ahora. Especialmente quiero destacar el leonesismo de Pablo del que alardea siempre. La entrevista empezó así:

– Buenos días, Pablo: No te imaginas la alegría que me has dado al concederme esta entrevista.

– Es la ESA la que lo programa, porque yo digo sí a todo, pero ellos son los que lo gestionan.

– ¿Dónde estás ahora?

– Estoy en las instalaciones de la ESA en Madrid. Y tú, ¿dónde estás?

– Estoy en mi casa, en León, a 3 bajo cero en este primer día de febrero. ¿Estás preparado para recibir un baño de multitudes de tu pueblo este fin de semana?

– No han parado desde noviembre, pero no sé lo que se les habrá ocurrido ahora.

– Sabes, Pablo, que soy un profesor jubilado que escribe todas las semanas en La Nueva Crónica de León y suelo poner énfasis en todo aquello que resalta en nuestra provincia en temas educativos. Probablemente lo que más ha destacado en los últimos años ha sido tu elección por la Agencia Estatal Europea como astronauta titular en la promoción de 2022. Tú eres un ídolo para los niños y jóvenes leoneses. Tu ejemplo y tus palabras pueden calar en ellos. Ese es el único objetivo esta encuesta. Me interesa conocer al Pablo ‘niño’ y al Pablo ‘adolescente’ de las escuelas de primaria, secundaria y bachillerato. Me interesa el Pablo ‘leonés’ no el Pablo ‘mundial’. De todo lo que ocurrió después de tu graduación de segundo de bachillerato en Eras ya han informado los periódicos. A partir de aquí sólo me interesa lo que tú digas. Por favor, desahógate sin miedo o recelo, con espontaneidad y libertad. Yo intentaré lanzar ideas para que tú hables.

– Va a ser muy fácil porque yo soy muy leonés y presumo de ser leonés. Vas a conocer al Pablo leonés.

Ese fue el principio de la entrevista que terminó así:

– Sí, Pablo. Subirás alto, a la luna, pero no te olvides nunca de tus raíces, de la Omaña o el río Luna. Baja. Vuelve a León, vuelve a tu casa. Los leoneses estamos orgullosos de ti y de cómo eres . No cambies, por favor. Tengo la impresión de haber pasado un rato maravilloso contigo. Con un muchacho corriente, normal, sencillo, natural, directo, franco, sincero, llano y familiar. Para llegar a este perfil sólo puede haber una razón: «Eres un genio». Muchas gracias. Estaremos en la luna contigo y te esperaremos en TU tierra siempre. Ahora falta sólo un minuto de entrevista. Es tu minuto de oro, Pablo, como hacen los políticos en sus campañas electorales. Con este minuto tú cierras esta amena, agradable, placentera, humana y divertida tertulia.

– Secundino, muchísimas gracias por esta entrevista que me ha encantado y ha sido muy distinta a todas las que hasta ahora me han hecho. Hemos revisado un poco esa parte más leonesa y de la infancia que siempre va a estar ahí. Yo me quedo con que es importante que todos estos agradecimientos y felicitaciones deben tener una respuesta por mi parte, que va a ser ‘un compromiso con León y con mi tierra’. Yo voy a hacer todo lo posible por intentar cambiar las cosas aquí. Que mejore todo lo posible y aportar en lo que esté en mi mano para que León vaya para adelante, que los jóvenes no se tengan que ir. Tampoco voy a poder hacer mucho, pero llevaré el nombre de León y los problemas que tenemos por todos los sitios que yo vaya. Son mis raíces y cualquier viaje no es un viaje completo hasta que no vuelves a tu casa. Cuando vaya a la estación espacial o a la luna, creo que lo mejor del viaje de verdad lo hace el volver a casa con los míos, a pasear por la orilla del Bernesga o por el centro de León.

– Gracias, Pablo. He pasado un rato muy agradable contigo. Muchas gracias por este enorme regalo. Todo ha sido espontáneo y maravilloso. Gracias

– Es verdad, Secundino, todo ha sido espontáneo, natural y diferente. Si alguna vez nos cruzamos por León, por favor, quiero tomar un café contigo.

Mis queridos lectores, esta entrevista a nuestro Pablo astronauta no tiene ni una sola letra de desperdicio. Este muchacho tiene una cabeza bien amueblada y cada respuesta es una joya. Recuerda su niñez, habla de sus amigos, da consejos a los alumnos, ensalza a sus profesores y define el perfil del profesor ideal. Me emociona el amor a su tierra y me encanta que su deseo después de pisar la luna es volver a León, con el que está comprometido.