angel-alvarez.png

Lágrimas anticipadas

10/05/2023
 Actualizado a 10/05/2023
Guardar
La Deportiva y el Málaga disputaron el pasado domingo un partido en el cual la victoria se antojaba obligatoria para ambos conjuntos. Quizás aún más importante si cabe para los costasoleños que, con cuatro puntos de ventaja sobre los bercianos, aún albergaban bastantes posibilidades de conseguir la permanencia. Para los de Juanfran García todo lo que no fuera sumar los tres puntos era certificar un descenso cantado desde hace varias semanas. Y, con esta tesitura, los dos equipos disputaron una primera parte anodina, con escasas ocasiones y con la sensación de que ambos tenían miedo a caer derrotados, especialmente los bercianos.Todo cambió en un segundo acto mucho más vistoso y donde el Málaga con la entrada del jovencísimo Álex Calvo fue mucho más incisivo y puso cerco a la portería local, pero se topó con un extraordinario Miguel San Román, guardameta que ha suplido a Amir en los dos últimos encuentros. La Deportiva buscaba la réplica con algunos contraataques pero sin acierto, y el partido pedía a gritos la entrada al terreno de juego del gran capitán. Juanfran lo vio y lo introdujo por Naranjo, junto a Naín por Hugo Vallejo. Y Yuri sólo necesitó tres minutos para perforar la meta de Yáñez tras una gran jugada individual pero, no contento con eso, diez minutos más tarde y en otro contragolpe batía nuevamente al portero malaguista tras un gran servicio de Dani Ojeda en un fugaz contragolpe para poner la sentencia. El brasileño recordaba al de las mejores tardes, a ese que durante tantos años levantó de sus asientos a El Toralín con tantas jugadas para el recuerdo y goles que nos dieron extraordinarios triunfos que jamás podremos olvidar. Pero a la conclusión del encuentro, el diez blanquiazul no podía reprimir sus lágrimas, sabedor de que esta victoria llega demasiado tarde, pero también con la esperanza de apurar ese 1% de conseguir la permanencia. Quizás, en algún momento, también se le habrá pasado por la cabeza que pudieron haber sido los dos últimos tantos en el templo blanquiazul, al menos en el fútbol profesional (quedará otra oportunidad ante el Albacete dentro de dos semanas), pero siendo consciente que ese final que nadie queremos cada día está más cercano. Y ese día, como en su primera salida del club allá por 2016, volverá a derramar muchas lágrimas, posiblemente más que nunca y muchos aficionados lo haremos con él. Las del domingo solo fueron un anticipo de lo que, desgraciadamente, está por venir en el futuro de la Deportiva.
Lo más leído