No tiene que ser fácil haber sido presidente del Gobierno y pretender pasar inadvertido allá por donde vas. Lo sabe bien el leonés nacido en Valladolid José Luis Rodríguez Zapatero, que finalmente desistió de hacer su casa en León porque había demasiadas pegas en el proceso. Eso no quita para que vuelva a León siempre que puede y para que aproveche para regresar a los restaurantes que un día fueron escenario de sus conspiraciones, en las que demostró tremenda habilidad, como es el caso de un conocido establecimiento de Villaobispo con mucha estrella.
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