Hay una nueva urgencia en esta comunidad.No es el cambio climático, ni el lobo, ni las desigualdades entre provincias, ni combatir a la extrema derecha, ni la PAC, ni contener la despoblación.... Es algo mucho más trascendental: conseguir entradas para la gala de los Goya que se celebrará en Valladolid el 10 de febrero. Los poderes políticos, económicos y mediáticos, tan acostumbrados aquí a repartirse todos los pasteles, rebuscan en vano entre sus contactos un enchufe para codearse con el famoseo patrio, enésimo ejemplo de que en Valladolid, pese a sus ínfulas, pueden ser exactamente igual de paletos que en todas partes.
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