pedro-j.-abajob.jpg

La cofradía de los tragones

29/04/2024
 Actualizado a 29/04/2024
Guardar

Los españoles desde hace siglos hemos sentido la necesidad de juntarnos o agruparnos en cofradías, hermandades, asociaciones o clubes y el asociacionismo es una costumbre afortunadamente muy arraigada de momento entre nosotros. Por eso hay quienes pretenden destruirla de diferentes modos. Y si no se lo cree pregunte a quien maneja listados de una entidad de este tipo el número de altas y de bajas que hay cada año o los niños que había hace dos o tres décadas y los que hay inscritos en la actualidad.

Y una de las costumbres más habituales dentro de las propias cofradías, hermandades o asociaciones es una comida, una cena, las dos cosas o ambas varias veces al año, como es lógico y normal por aquello de que en una fiesta de pueblo se puede prescindir de muchas cosas en el programa pero lo que nunca ha de faltar es lo de «misa y mesa». 

De hecho, conozco un par de casos de celebraciones de cofradías donde con el paso del tiempo lo de la misa pasó a ser testimonial y los fastos se reducían a comidas, cenas, aperitivos y meriendas hasta tal punto que el capellán que estaba al mando teóricamente espiritual de la hermandad les aconsejó dejar al santo protector y titular a un lado y crear una asociación gastronómica. Ni cortos ni perezosos, más del cincuenta por ciento de los hermanos le tomaron de la palabra.

Era la cofradía de los tragones a efectos prácticos, aunque en los documentos oficiales figuraba con otro nombre con la intención de obtener subvenciones de diferentes entidades tanto públicas como privadas, porque esta gente no distingue ni tiene límites, pero todas ellas destinadas a saciar su hambre y su sed. La cuestión es que no había evento de lo que fuera en el que no se presentaran como «asesores» o como «colaboradores» con la intención de sacar tajada de alguna manera hasta que llegó algún alcalde a plantarles cara y mandarlos a zampar a otro sitio. Por ejemplo, donde el que reparte las ayudas bien podría ser nombrado gran maestre, hermano honorario o cofrade mayor de los tragaldabas y por eso son tan habituales en cualquier evento donde haya platos de por medio. 
 

Lo más leído