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As bestas andan soltas

06/12/2022
 Actualizado a 06/12/2022
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Una de las primeras opiniones que he tenido el privilegio de publicar en este periódico se titulaba ‘Luchar contra molinos de viento’, hacía referencia a una de las consecuencias de la despoblación, el paro y el envejecimiento poblacional de este modelo de éxito de comunidad autónoma, la proliferación desmedida y especulativa de los parques de energía eólica y fotovoltaica. La falta de regulación en Castilla y León de criterios para el despliegue de las energías renovables y el hecho de que se trate de un territorio muy extenso cada vez más despoblado y con pocas oportunidades lo convierten en el paraíso perfecto para sembrar nuestros montes y llanuras de molinos y placas a bajo precio, calderilla para empresas con grandes beneficios que comercian con la energía que emana de nuestra tierra y que pueden poner punto final a las potencialidades ecosistémicasde nuestro patrimonio natural, recursos forestales, agrícolas y ganaderos. El pasado viernes, recuperando buenas y viejas costumbres de disfrutar de una peli en el cine, a oscuras, en silencio y con olor a palomitas, vi ‘As Bestas’ que con 17 nominaciones se coloca como favorita para los premios Goya del cine español. Salí del cine muy cabreada, con sensación de impotencia y de mal gerol a pesar de pensar que acababa de ver «un peliculón». Impotencia al reconocer la bestialidad humana en una historia basada en hechos reales, bestialidad que habita en la esencia de nuestro propio ser como parte de la naturaleza que habitamos, forzada a mostrar su cara más cruel y dura cuando la supervivencia está en juego. Fomentar el odio y el enfrentamiento entre ecologistas, ganaderos, proteccionistas y cazadores con el propósito de obtener rédito económico y/o político es ruin y puede tener dramáticas consecuencias para los que siempre pierden, la gente más humilde y la tierra que maltratamos como si fuera inmortal a pesar de sus pedidos mudos de ayuda. ‘As Bestas’ narra una historia que desgraciadamente abunda en el medio rural, la historia de Antoine y Olga, una pareja de mediana edad de origen francés que vive en una aldea gallega, cultivando la tierra y restaurando antiguos caseríos para repoblar el lugar. Su origen, la envidia, el miedo a lo diferente, a otras formas de ver la vida porque el cambio siempre asusta y en concreto la oposición a la instalación de un parque eólico en la aldea despierta la enemistad de algunos lugareños. La película juega con el concepto de quiénes son en realidad as bestas ¿Los animales o los aloitadores que las abaten?, yo diría que as bestas que andan soltas son quienes nos enfrentan a los que queremos lo mismo, la supervivencia de nuestra tierra, la preservación de nuestro entorno como fuente de riqueza, belleza y futuro, aunque tengamos que llegar a consensos de cómo conseguirlo. Hace poco desayunábamos con la noticia de que el lobo seguirá estando estrictamente protegido en toda la Unión Europea y en los demás países firmantes del Convenio de Berna para la conservación de la vida silvestre y el medio rural en Europa. Una realidad conocida y advertida desde el inicio del fomento de una polémica dirigida de manera populista desde la Junta de León y Castilla con el propósito de prometer imposibles en búsqueda de votos y de desgastar al Gobierno de España para no abordar los problemas de nuestra ganadería de la única forma posible, ayudas ágiles y proporcionadas a las pérdidas ganaderas relacionadas con el ataque de este super depredador, reconociendo del lucro cesante en toda su extensión, La Junta de Castilla y León tarda más de dos años en pagar las indemnizaciones por ataques al ganado por animales salvajes y dos de cada tres indemnizaciones se quedan sin pagar. El reciente reconocimiento a León por las Naciones Unidas como Patrimonio Agrario Mundial debe ser apoyado de manera que le permita seguir existiendo y existe porque posee 10.000 km cuadrados de territorio montañoso con un enfoque multi-productivo, agrícola, ganadero y forestal. Albergamos el mayor número de reservas de la biosfera del mundo (siete), además de cinco reconocimientos de la Unesco y la mayor parte del único Parque Nacional habitado de España, Picos de Europa. Su biodiversidad es causa y consecuencia de esta riqueza única en el mundo. No es compatible apoyar públicamente al Sistema Agrosilvopastoril Montañas de León como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM) porque queda bien en la foto y pretender convertir nuestra montaña en plataformas de molinos y placas, mirar hacia otro lado con los incumplimientos de las empresas más contaminantes de nuestra provincia y apoyar las mentiras y falacias de la Junta de León y Castilla con respecto al lobo. Cuídense porque as bestas andan soltas…y no me refiero al lobo.
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