marfte-redondo-2.jpg

Adolescencia rasgada

18/03/2023
 Actualizado a 18/03/2023
Guardar
En la sala de curas entró la pequeña pálida, ojos lánguidos y porte alicaído, adolescencia rasgada. Bajo las vendas, multitud de marcas, cortes interminables tintados del amarillo marronáceo de la pavidona yodada. Cicatrices prematuras en el alma. Los quince años no deberían ser para padecerlos. Lidia es una más entre las muchas que claman ante la ausencia de todo.

Sospechaban que eran consecuencias post pandémicas, pero es ya desde hace más tiempo. Las alarmas nos previenen de que los goteos vienen siendo constantes.

Cada vez crecen más los que deciden apearse de la vida.

Mientras, todos se echan las manos a la cabeza: directores y equipos educativos de los centros escolares de toda España denuncian la falta de especialistas para atender los problemas de salud mental de nuestro alumnado. Se analizan causas: familias desestructuradas, despersonalización y falta de autoestima por exceso de exposición en las redes sociales que provoca una banalización de las relaciones humanas; el ser humano reducido a artículo de consumo como mercancía maltratada. Violencia gratuita narrada en directo como obsesión por gustar y que me lo demuestren; me miras, me juzgas, me etiquetas y hasta me encorsetas. Ridiculizas lo que muestro y lo que expongo. Al exhibirme quedo a la intemperie, a la exposición del ojo crítico y la lengua hiriente, al linchamiento burlón en la palestra digital. Y si no me expongo y permanezco al margen, me dejan sumida en el frío anonimato de los ‘frikis’ que pueden ser condenados al ostracismo, así que hagas lo que hagas puedes convertirte en carne de cañón.

Y en medio de este laberinto la ley de protección de la infancia frente a la violencia (Lopivi) y la ley educativa (Lomloe), recogen una figura de obligatoriedad en los centros educativos: el Coordinador de Bienestar.

Algunos profesionales han puesto el grito en el cielo: «Se le han atribuido un montón de funciones, pero sin tiempo de dedicación en la jornada laboral para aquellos que las asumen». Así lo afirma Esteban Álvarez, el presidente de la asociación que reúne a los directivos de los centros de ESO de Madrid, que añade también que «las funciones que tiene atribuidas el Coordinador de Bienestar son más propias de un psicólogo o alguien con formación psicopedagógica muy intensa, más que para una profesora de matemáticas o un profesor de lengua, por mucha disposición y sentido común que le echen».

Quizá, algo que podemos hacer por su bienestar, es escucharles, abrir los ojos, y retirarlos de las pantallas, para recordarles que tanto padres como educadores estamos aquí.

A lo mejor, si Lidia hubiera tenido este apoyo, no estaría ahora en la sala de curas.
Lo más leído