El edil manifestó su frustración por no poder dar pasos adelante «son unos irresponsables, ni hacen ni dejan hacer», lamenta.
Mendo no pudo calificar la postura de la oposición, a la que culpa de haber perdido, en los últimos dos meses, hasta 11 millones en inversiones (al rechazar el presupuesto y ahora el proyecto para invertir los remanentes).
El edil asegura que, por parte del equipo de gobierno se ha dado celeridad a los trámites de este plan para cumplir con los tiempos y asegura a la oposición que todos los servicios técnicos de la casa están a su disposición para que no haya retrasos, pero afea que ya se estén produciendo con los primeros pasos.
De inicio, intervención pidió aclaraciones sobre algunas obras, puesto que no parecían entrar en el apartado de sostenibles, sobre todo tres referentes a la eliminación de fibrocemento en las calles y la inversión de 600.000 euros para el plan de accesibilidad propuesto.
Según Mendo, estas obras no incluían la mejora de las aceras al cambiar las tuberías o la inversa, en el caso del rebaje de aceras dentro del plan propuesto. Las aclaraciones tuvieron como respuesta un documento que «no era coincidente» con el aprobado previamente por la oposición «algo que nos parece sorprendente» y , apunta el concejal «podría haber hecho que las enmiendas aprobadas fueran nulas». Pero «no queremos llegar a ese punto porque retrasaríamos los procesos», dice, por lo que advirtieron de ello a la oposición para que subsanara los errores y pudiera seguir adelante el procedimiento.
De todos modos, los trámites a efectuar se incluyen en 11 apartados que ha entregado Intervención «y vamos por el primero», dice Mendo, cuando la propuesta del equipo de gobierno «ya estaría en el séptimo». Aunque ambos documentos coinciden en un 66%, en total en 22 obras de las 33 previstas. Las otras 11 requieren de un procedimiento largo, que tal vez haga que el plan no pueda salir en tiempo y los más de 3 millones de euros puedan ir a amortizar deuda «y Ponferrada los necesita, porque todos sabemos las carencias que hay y para solucionarlas necesitamos dinero». Por eso Mendo aún ve como salida negociar las enmiendas de la oposición y llegar a un entendimiento que haga factibles las obras, aunque, de inicio, asegura no ver demasiada voluntad en sacarlas adelante. Mendo llega a apuntar que ya son 15 días de retraso sobre el cronograma previsto los que se acumulan, algo que ya dejaría el documento en papel mojado y en imposible si requieren proyecto, pero sigue lanzando el guante a la oposición para poder planificar un documento´ágil y hábil.
Por su parte, el portavoz de Unidad Social de Electores, Samuel Folgueral, asegura que las obras presentadas no tienen la calificación de no sostenibles, por lo que todo apunta a que lo son, defendió.
Frente a las críticas de Mendo y su propuesta de abrir una nueva negociación que alcance un acuerdo factible para realizar las obras con los remanentes de 2017, el portavoz de Unidad Social de Electores, Samuel Folgueral, apuntó que ese montante «solo se perderá por la ausencia de voluntad de la alcaldesa» y lamentó que «ahora se nos quiera responsabilizar de esa falta de voluntad» a la oposición.
«Solo se perderán los remanentes por la ausencia de voluntad de la alcaldesa», dice Folgueral
Folgueral apuntó que las cuestiones presupuestarias del gobierno de Gloria Fernández Merayo son «la gran mentira del bipartito», dijo, uniendo al gobierno capitaneado por el PP el de Coalición por el Bierzo. Folgueral puntualizó cada promesa realizada por la regidora para atraer fondos europeos, tras cerrar una oficina que el gobierno Folgueral había ideado para ello, y que llegaron a suponer una pérdida de 10 millones de euros «que le correspondían», por los Fondos Europeos Edusi (Desarrollo urbano sostenible).
Esa «pérdida de oportunidades» fraguada durante el gobierno de Merayo, teme que se deje ver ahora con la pérdida de los remanentes «que quiere cargar a nuestras espaldas», critica y defiende que «no tiene excusa» para avanzar con el documento de obras presentado por la oposición y que debería aprobarse en el pleno ordinario de octubre.