"Un respeto, ahí está mi familia"

La sequía de este verano está provocando todo tipo de situaciones. Una de ellas es que han emergido de las aguas pueblos que permanecían tapados, como en el embalse de Luna, o en el caso de Riaño, donde no aparecen construcciones pues fueron destruidas, ha quedado a la vista la plancha de hormigón con la que se había sellado el cementerio. Ante esta situación algunos antiguos vecinos han colocado flores y cruces en los lugares donde ‘calculan’ que están las tumbas familiares. Pero algunos de los visitantes se han encontrado con una situación desagradable, la aparición de una grieta por la que se filtrará el agua cuando suba el nivel.

El Ayuntamiento de Riaño sellará la grieta aparecida en el sellado del cementerio antes de que suba el agua Esta situación ha provocado malestar en algunos de los antiguos vecinos, como el caso de Mari Paz, quien ya se ha dirigido al Ayuntamiento para hacerle saber esta situación. «Creo que deberían atajarlo sin perdida de tiempo, no sabemos si es competencia del Ayuntamiento o de Confederación, pero creo que merecemos un respeto pues a fin de cuentas buena parte de mi familia está ahí abajo y no es nada agradable la imagen que se va a producir».

Imagen que, por otra parte, ya se ha producido en otros cementerios del valle, como es el caso de Pedrosa del Rey, donde han aparecido huesos que han sido recogidos por los vecinos. Son los que aparecen en la foto.

En el Ayuntamiento han recibido las quejas y la respuesta del alcalde, Fernando Moreno, ha sido la de ponerse manos a la obra. Ya han estado los empleados municipales para ver la grieta que han comprobado que existe y el alcalde manifiesta que será sellada en el mínimo tiempo posible, antes de que las esperadas lluvias hagan que suba el agua y vuelva a cubrir esta plancha con la que fue sellado el viejo cementerio.

Otros vecinos recuerdan que en el momento del cierre del pantano, en 1987, no tuvieronla posibilidad de trasladar los restos a otro lugar pues el nuevo cementerio aún no estaba construido, «con las prisas de echarnos de casa».