Leoneses y orgullosos

No hay cosa de la que más nos guste presumir, ni que más nos entusiasme, que todo lo que tenga que ver con nuestra tierra. En la semana que hoy finaliza (y que empezó por San Froilán) ha quedado bien claro. No hay más que entrar en Facebook y ver las publicaciones de los últimos días. Sí, son muchas, lo sé. Pero durante los días de exaltación de tradiciones (San Froilán y los carros engalanados y Cantaderas) se multiplicaron los comentarios, los ‘Me gusta’ (que ahora podrán ser ‘Me encanta’) y las noticias compartidas. Y eso que en esta ocasión no acompañó el tiempo y los pendones, una de las señas de identidad de esta provincia, tendrán que esperar al próximo San Froilán.

Ahora bien, no hay cosa que más nos enamore de esta tierra que sus comidas. El artículo de ‘Los diez manjares más leoneses’ se compartió más de 300 veces desde nuestra página en Facebook y, solo por los comentarios la lista de alimentos de nuestra tierra creció en otros diez o veinte manjares.

Para hablar de otra tradición (más o menos criticable) esta semana hemos estado a vueltas con las novatadas. Veteranos y novatos se emborrachan, a veces más de la cuenta, en el campus, sin hacer mucho caso a la Universidad (y no estoy diciendo que no vayan a clase al día siguiente a consecuencia de la resaca), que recuerda que están prohibidísimas."Ya no sirven esas tendencias abusivas", comentaba Javier García en Facebook.

Continuando con las celebraciones, la UME cumplió diez años y la base Conde de Gazola se vistió de gala, otro de los acontecimientos más vistos de la semana.

¿Buenas noticias? Parece que el 22 de noviembre habrá oposiciones de enfermería. "Ya era hora", decía Diana.

¿Malas? No hay semana que pase sin ellas. Por desgracia. Everest firmó la última página de su libro. Se acaba el calvario de sus trabajadores, pero de la forma menos deseada.