La Real Colegiata de San Isidoro acogerá la tradicional ceremonia de Las Cabezadas

La Real Colegiata de San Isidoro de León acogerá este domingo la ceremonia de Las Cabezadas, una tradición que se remonta al año 1158 y en la que los poderes eclesiástico y civil de la ciudad mantienen una disputa dialéctica en torno a si la ciudad ofrece un tributo “de un cirio de arroba bien cumplida y de dos hachas de cera” de forma voluntaria -“oferta”- o por obligación -“foro”-. La leyenda cuenta que los leoneses decidieron sacar ese año en procesión los restos de San Isidoro como rogativa de lluvias, una petición que fue respondida con abundantes lluvias que acabaron con la pertinaz sequía que asolaba los campos.

Este año, el alcalde, José Antonio Diez, será el síndico municipal que represente al poder civil mientras que el Cabildo estará representado por el exabad de San Isidoro, Francisco Rodríguez. La ceremonia arrancará a las 11.45 horas, cuando la comitiva formada por la Corporación Municipal, con el regidor a la cabeza, parta de la plaza de San Marcelo en dirección a la Basílica. La llegada a la Real Colegiata de San Isidoro, donde les recibirá una representación de la Asociación de Pendones Reino de León, está prevista a las 12 horas.

En ese momento, Diez y Rodríguez contarán con tres turnos de intervención cada uno para defender, con tono humorístico, la supuesta obligatoriedad o no del tributo. Como en años anteriores, se prevé que el debate finalice en tablas sin que los participantes lleguen a ningún acuerdo, antes de que los representantes municipales completen la ofrenda.

Tras el debate y el intercambio de obsequios, se celebra una misa solemne en el interior de la Basílica y el acto concluye con las tradicionales Cabezadas, tres exageradas reverencias que los miembros de la Corporación Municipal rinden a modo de despedida a las puertas de San Isidoro.