Y nació el centro. Es una realidad hoy dependiente de la Diputación y están celebrando sus cincuenta años de vida con diversas actividades, una de ellas una exposición itinerante que ayer se inauguró en el Museo Etnográfico Provincial de Mansilla, donde permanecerá todo el mes. Uno de los monitores, Gabriel Bugayo, a su vez uno de los encargados de los actos del cincuenta aniversario, explicaba que «se trata de una muestra sobre la vida del centro, desde la foto de la primera piedra, es la verdad de Cosamai. Con ella recorreremos todas las comarcas leonesas pues entre los más de 130 residentes los hay de todas y así les podremos acercar lo que es la vida de este centro tan especial». Están cuadrando las fechas pero solicitudes no les faltan e «iremos a todas partes».
La principal función de la exposición, que lleva por título ‘Con los ojos de Cosamai’, es «acercar a los ciudadanos a la conquista de derechos que han vivido, y siguen viviendo, las personas con discapacidad intelectual, que vean cómo ha sido esa conquista, en la que todavía están, de ser ciudadanos de pleno derecho. Siendo por ello que los verdaderos protagonistas de esta exposición son las personas con discapacidad intelectual». Y ya lo fueron ayer, protagonistas, pues ellos fueron los que explicaron sus trabajos en Cosamai, los talleres... Fue un momento emotivo cuando Mari Ángeles, Ana Isabel, David y Sergio explicaban a los asistentes —entre los que estaban los niños de los coles de Mansilla— cómo trabajan en sus talleres de jardinería, encuadernación, carpintería, cerámica, cartonaje... Breves y concisos supieron llegar a los asistentes, que completaron su idea de Cosamai viendo las imágenes «con los ojos de Cosamai», los de estos chavales y los otros 130 que quedaron en Astorga.No hubo esta vez representación institucional, la agenda estaba ayer llena para todos ellos. Cincuenta años en fotos desde aquellas palabras del obispo que el gran estudioso y conocedor de las obras sociales en León, también trabajador de este centro durante cuatro años, Casimiro Bodelón, completaba con algún dato y algún nombre más: «Cosamai es una obra maestra que empezó Don Marcelo (González Martín) y Patricio Vara desde Cáritas Diocesana de Astorga y que luego, como las criaturas bien alimentadas y educadas, ha ido creciendo y desarrollándose en todos los sentidos. Son muchos los esfuerzos y las energías invertidas en esa magna obra social, orgullo de la Diócesis asturicense, de los Hermanos Holandeses, de la Diputación de León y de todas las personas que, de una u otra manera, han arrimado el hombro para tirar del carro, un carro nada cómodo de llevar, pero que sigue prestando una ayuda impagable a los discapacitados». Porque ellos son los destinatarios de Cosamai: «Abierto a la atención de personas con discapacidad intelectual ligera o media en edad laboral y con un carácter mixto, de servicios de residencia por un lado y los talleres por otro».
Introduce Bodelón el recuerdo de los Hermanos Holandeses, una singular comunidad religiosa que se hizo cargo del centro e implantaron un modelo de gestión desconocido en España, de la mano del recordado hermano Teo (Theo Van der Boer: «La base del modelo era el apoyo integral». Al entrañable recuerdo de estos Hermanos holandeses sumaba el citado Bodelón otros pioneros, como «D. Patricio, el hombre que gastó lo mejor de su vida para poner la obra en marcha y Don Hortensio Velado tan querido por los internos».
Ya en 1974 se hizo cargo del centro la Diputación, «con un compromiso que se mantendrá en el tiempo porque es una labor muy importante y necesaria», señaló el presidente de la Institución cuando se anunció la celebración del 50 aniversario, que se cumplió exactamente el 22 de enero.
El citado Gabriel Bugayo explicó otros de los proyectos en los que están trabajando para este año tan especial:«Hay dos que nos parecen importantes porque entroncan con la historia de Cosamai, ya que dos de sus señas de identidad durante mucho tiempo: El Circo y la Romería. Este año ya hemos acudido a la Piñata de Astorga vestidos de troupe circense; y en el fin de semana del 12 y 13 de mayo recuperaremos la romería de Cosamai, en la que no faltará ninguno de los ingredientes de una gran romería: la procesión, los pendones, los dulzaineros, las carpas, una pulpeira, un bar con paella, juegos tradiciones, juegos infantiles para los más pequeños». También mantendrán otras actividades que ya vienen realizando, como la participación en programas dedicados a ellos en la Cadena Cope de Astorga.
En definitiva, una forma de vida, un lugar especial, que cumple cincuenta años enseñando sus entresijos, comarca a comarca y con parada ahora en el Museo Etnográfico.