‘The Creator’
Director: Gareth Edwards.
Intérpretes: John David Washington, Gemma Chan, Ken Watanabe.
Género: Ciencia Ficción /Acción.
Duración: 133 minutos.
Este 2023 habíamos tenido taquillazos de todos los colores, desde las habituales películas de superhéroes, pasando por no pocos dramas, una más de misión imposible y hasta comedias protagonizadas por muñecas. No obstante, si ha habido un género que ha brillado por su ausencia ha sido el de la ciencia ficción. Hasta Christopher Nolan, uno de los mayores valedores del feudo de Asimov, ha optado por el ‘biopic’ este año. Para llenar este vacío en las carteleras y en los corazones de todos los que amamos esta clase de cine, ha llegado ‘The Creator’, que tenía todas las papeletas para convertirse en un nuevo hito generacional, lamentablemente su guion no está a la altura de su ambición.
‘The Creator’ nos emplaza en un futuro cercano, donde la humanidad se encuentra en guerra contra las inteligencias artificiales (IAs), las cuales son destruidas en Occidente, pero encuentran refugio en la llamada ‘Nueva Asia’. En medio del conflicto se encuentra Joshua, un agente especial americano que se infiltra en territorio enemigo para encontrar el último arma de Nirmata, el mítico ‘creador’, al que las IAs veneran como a un dios, que podría decidir el destino de la raza humana. No es hasta que Joshua descubre que dicho arma no es otra que una niña pequeña, que comienza a plantearse de qué lado está.
‘The Creator’ ha llegado a los cines sin hacer mucho ruido, con un par de tráileres y poco más, una discreta campaña de marketing fruto de su ‘ajustado’ presupuesto de 80 millones de dólares, una cifra que la mayoría de ‘blockbusters’ actuales rebasan sin miramientos. El anunciarse a bombo y platillo no siempre es sinónimo de éxito, es más, está contrastado que el de la ciencia ficción es un mundillo generoso, donde los proyectos más humildes a menudo se revelan como auténticas perlas, véase el caso de cintas como ‘Ex machina’ o el mismísimo ‘Terminator’, que contó con un presupuesto propio de una película para televisión, con menos de 7 millones para crear una de las obras más influyentes de la cultura popular. Esta filantropía, particular de un género que, al igual que el terror, tanto le debe a la ‘serie B’, es cada vez menos correspondida gracias a la imperante moda de las películas-evento, en las que un estudio debe hipotecar hasta los muebles para conseguir llenar las salas de cine, relegando a las medianas producciones, de las pequeñas ni hablamos, al streaming o al fracaso en taquilla, ante una audiencia sobreestimulada y cada vez menos impresionable. Parecía que ‘The Creator’ podría ser un revulsivo, uno que conseguiría emocionarnos con una historia libre del distópico monopolio creativo que parece cada año menos cosa de ficción y más el pan de cada día. Pero uno comienza a oír bufar al gato encerrado cuando se percata de la megalómana mano de Disney moviendo los hilos de ‘The Creator’, a través de sus recién adquiridos ‘20th Century Studios’, todo lo que queda de la antaño todopoderosa ‘20th Century Fox’. Un gato que sale de la bolsa colmada de expectativas para revelarnos una historia que, pese al evidente esfuerzo en su apartado técnico, se siente vacía.
Escribe y dirige Gareth Edwards, quien alcanzó fama mundial dirigiendo el remake de ‘Godzilla’ de 2014 y se ganó al bunker del frikismo con la emocionante ‘Rogue One: Una historia de Star Wars’. A pesar de la recepción dispar de su primera gran producción con respecto a la segunda, ambas fueron aplaudidas por sus efectos especiales, disciplina en la que Edwards se había curtido en su carrera como supervisor, llegando a crear él mismo los efectos de su primer crédito directoral, ‘Monsters’, la cual mostraba unos visuales sorprendentes para una película ‘indie’, mérito que no compartía con su guion, escrito de su puño y letra. Estos claroscuros del cineasta británico se subliman en ‘The Creator’, denotando su destreza como efectista, que no guionista.
A lo largo de todo el filme uno tiene la sensación de haber visto eso antes, pero mejor hecho, en otra parte. Hay un poco de ‘Avatar’, un poco de ‘Blade Runner’, algo de ‘Distrito 9’, etc. En general, mucho de otras obras , pero casi nada de ‘The Creator’, que no consigue encontrar su voz entre tanto ruido, repasando todos los clichés que cabría esperar de una cinta de este estilo. Resulta curioso que la película trate sobre inteligencias artificiales, cuando parece que el argumento hubiera sido redactado por ChatGPT. El resultado final es funcional, como el producto de cualquier IA que se precie, aunque, por su propia condición, le falta un toque humano, una chispa de originalidad que haga de este collage de elementos característicos de la ciencia ficción un relato con tanto que decir como que mostrar. Y es que su apartado técnico es la otra cara de la moneda, con unos visuales apoyados en la fotografía de Greig Fraser (‘Dune’, ‘The Batman’), capaces de hacer que el futuro se sienta tan real como hermoso. Un mundo que se escucha al son de Hans Zimmer, que sin componer uno de sus trabajos más memorables, cumple con creces; muy a tono con el resto de ‘The Creator’.
Con todo y con eso, ‘The Creator’ no deja de ser una obra muy disfrutable, con un diseño de producción inmersivo, que parece quitarte el reloj y apagarte el móvil, y una historia, a imagen y semejanza de sus evidentes inspiraciones, entretenida y emocionante, que te deja con ganas de más, pero con buen sabor de boca. Puede que no sea el nuevo clásico de la ciencia ficción con el que uno sueña volver a ver en el cine, pero va por el buen camino, marcando la senda que debe seguir el cine comercial si no quiere estancarse para siempre en secuelas, remakes, franquicias y demás palos en la rueda de la libertad creativa.