La enciclopedia de la sangre

18/10/2019
 Actualizado a 18/10/2019
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Conocí una antigua tradición de algunas familias marcadas por la fuerza de las mujeres de la casa según la cual cuando la cabeza de familia iba a irse para siempre –que curiosamente siempre ocurría en la cama de su casa por apagón de la vida– le pedía a otra mujer joven de su misma sangre, inexperta en las cosas de la vida, que le cogiera la mano, que se entrelazaran las de la niña y la anciana, y así unidas esperaban a que llegara el momento final.

Todas aquellas mujeres que un día abrazaron las manos ancianas cuando aún eran niñas aseguran que en un momento determinado sintieron una especie de calambre, una mínima descarga que recorrió su cuerpo y la mano de la abuela se soltó, cerró los ojos con cara de placidez... y es que todo se había acabado para la anciana y arrancaba el camino de la sabiduría para la niña.

Por eso se llamaba a esta forma de adiós «pasar la sabiduría».

Desde ese momento era frecuente en aquella casa, entre las gentes de la familia, preguntarle a la niña por cosas que no debería conocer... pero conocía, tal vez le había llegado en el último chispazo de otra vida.

¡Qué pena del fin de esta creencia! ¡Cuántos problemas encontrarían la solución en este viejo rito! Escuchando lo que está escrito en la enciclopedia con más tomos y menos letras: la enciclopedia de la sangre.
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