El Sprint busca una solución que le permita competir en su casa

El Sprint León parece que se ha acostumbrado a vivir permanentemente en el alambre, si no es por problemas económicos, por otros con soluciones a priori mucho más complicadas.

En esta ocasión, el problema viene al exigir la Federación Española de Atletismo que el Sprint cuente en su ciudad con unas instalaciones reglamentarias para poder disputar competiciones de la máxima categoría, la División de Honor a la que el club leonés pertenece en categoría femenina, una medida abusiva ya que más allá de los méritos deportivos reduce la participación a tener o no un estadio de atletismo.

Hasta ahora, cuando el Sprint ha tenido que ejercer de anfitrión la competición se ha trasladado a Valladolid, donde sí existe al menos una pista de ocho calles y con una superficie homologada como exige la Federación, algo que en León no se da. La pista del estadio Hispánico cuenta solo con seis calles pudiendo albergar campeonatos hasta categoría autonómica y la pista de la universidad a pesar de contar con las ochoreglamentarias, tiene una superficie en mal estado que impide su utilización al más alto nivel, según ha denunciado en un comunicado el presidente del club José Enrique Villacorta.

León es junto con Teruel y Palencia la única provincia que no dispone de una pista homologada de ocho calles El entrenador leonés reclama en su texto la ayuda de la Diputación «ya que ahora solo contamos con la del Ayuntamiento»y destaca que León «es una de las tres provincias que no tiene una pista homologada junto con Teruel y Palencia, que tiene Valladolid muy cerca» así como el Sprint «es el único equipo de División de Honor que no cuenta con unas instalaciones homologadas en su ciudad».

Apoyados en los éxitos de atletas como Roberto Alaiz o Blanca Fernández el mundo del atletismo en León y especialmente todos aquellos implicados con el Sprint han comenzado una campaña a través de las redes sociales para pedir a las instituciones que se movilicen para tratar de salvar de alguna manera los obstáculos que existen ahora y poder tener en la ciudad una pista homologada de ocho calles.

Desde el Ayuntamiento de León, única institución que colabora con el club según reconoce el propio Villacorta y a la vez propietaria del Estadio Hispánico se reconoce la imposibilidad de realizar una obra faraónica que además es inviable ya que no se dispone del suficiente terreno para poder ampliar la pista y supondría un coste totalmente inasumible para el consistorio. Por lo tanto han de estudiarse otras opciones que consigan que el Sprint siga siendo una fábrica de atletas de élite.