Según explicó el concejal de Movilidad, José Antonio Cartón, desde ahora, momento en el que se han colocado las señalizaciones pertinentes en las calles afectadas, hasta el 1 de julio, se procederá a "informar y concienciar" a los conductores, pero no a sancionar. A partir de ese momento sí que habrá multas para los que superen esa velocidad, que parten desde los 100 euros, aseguró el intendente jefe, Arturo Pereira.
La modificación del reglamento de circulación que recoge los límites de velocidad en las ciudades se aprobó el 10 de noviembre y desde entonces, la Policía ha estado diseñando cómo articular la norma en la ciudad. De inicio, el cambio se ve justificado en la reducción de accidentes mortales. Cartón argumentó que, según las estadísticas, un atropello o accidente a 50 km/h es mortal en el 90% de los casos, mientras que si la velocidad se rebaja a 30 km/h, ese porcentaje se reduce hasta el 10%. También implica menor contaminación ambiental y se reducen los niveles de ruido en un 50%.
En Ponferrada, el 90% de los viales son de un único sentido y se verán afectados por la reducción en la velocidad.
El diseño presentado por el intendente y el concejal de Movilidad cuenta con ocho puertas de entrada a la ciudad por las que los usuarios de la vía deberán circular a ese máximo de 30 (entrarán por el Montearenas. por la avenida de Asturias, por la avenida de Galicia, por la avenida de Milán, la de Portugal, la de Molinaseca, la carretera de Sanabria y Camino de Santiago). A ellas se suman cinco zonas de "plataforma única" (en las que la acera está al mismo nivel que la calzada) y en las que la conducción se contempla a 20 km/h (estarán también en partes de la calle Camino de Santiago, en Gómez Múñez, en el casco antiguo, en la calle Ancha, en Esteban de la Puente, en Cruz de Miranda y también en las zonas peatonales de avenida de España y calle la Paz).
Cartón considera que es necesario un tiempo de adaptación algo que Pereira justifica en que en la ciudad hay una alta cantidad de conductores de edad y necesitan ese proceso "el diseño es práctico y sencillo para que todos podamos adaptarnos", explicó. Asegura que no son zonas en las que hubiera un número destacado de incidencias con respecto a las sanciones por traspasar los límites de velocidad ni atropellos. Es más, apunta que Ponferrada "está incluso por debajo de otras ciudades de su nivel en accidentes". Además, reconoce que en el centro tampoco el vial permite circular a más velocidad que la que ahora marca el límite, por lo que no se prevén problemas, ni siquiera de ralentización del tráfico "porque en Ponferrada no solemos tener atascos", dijo.