Desde entonces «hemos presentado de forma oficial once propuestas de cambio, todas ellas enmarcadas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas», explica Fernández. Además, la corporación del Ayuntamiento de Cubillos del Sil acordó aprobar, en pleno, antes de finalizar 2021, la Agenda 2030 local, pero «hasta la fecha, seguimos a la espera de que se produzca dicha aprobación», reclama Fernández Muiños.
En número de socios, el crecimiento ha sido exponencial pasando de los dos iniciales al centenar. Pero esa realidad que ha interesado a los vecinos, no ha hecho que los políticos se muevan y se acerquen al nido donde se han construido esas propuestas. «Nadie nos ha venido a preguntar o a proponer algo tras la difusión pública de estas iniciativas». Aunque sí han visto que algunas de sus ideas como la de evitar la destrucción de la antigua casa del sacerdote y en su lugar crear una oficina de turismo y un espacio para la conservación de los archivos históricos, así como una zona para aseos públicos se han recogido por alguna formación. Por eso recuerda Fernández que es «imprescindible que todos nos movamos en la misma dirección. Porque para conseguir resultados colectivos necesitamos jugar en el mismo equipo».
La agrupación ha lanzado propuestas para que Compostilla no sea desmantelada sin más, pero solo tiene esperanzas en un interlocutor y en que las ideas que puedan realizarse sean las comprometidas con el cuidado ambiental como retirar las líneas de alta tensión, reponer y acondicionar la zona verde de Endesa o crear un espacio protegido para los animales y la vegetación terrestre. Es Ciuden quien considera que puede hacer algo , por ser Cubillos un municipio referente en la transición justa que encabeza este organismo «tenemos la esperanza de que podamos aunar fuerzas y posibilitar algunas de las acciones de sostenibilidad que ya propusimos en su día», dice Fernández.
Tras un año de trabajo, el balance que hace ODS Cubillos es positivo, porque las administraciones sí parecen haber escuchado y ahora cuentan con una oficina de trabajo. Sin embargo, apunta que todavía falta «un reconocimiento real por parte de la administración local de que nos necesitamos mutuamente». Considera que esa falta de manos se debe a que «aún no estamos acostumbrados a que sea la propia ciudadanía la que trate de trabajar al lado y del lado de las instituciones». Por eso considera que ODSC es un ejemplo de organización dentro del tercer sector cuyo fin es impulsar iniciativas locales de abajo hacia arriba.
Iniciativas
Para contribuir en la búsqueda de soluciones a problemas locales, en la creación de empleo y conservación del medio ambiente, la agrupación presentó al Ayuntamiento una serie de propuestas comenzando con la de establecer un acuerdo con las entidades financieras que han dejado de dar servicio en el municipio.Propusieron resolver las múltiples deficiencias del polígono industrial de El Bayo mediante la creación de una alianza con la administración pública, solicitar la implicación de Forestalia en la subsanación de las deficiencias de las infraestructuras, además de esa recuperación de la casa sacerdotal.
En cuanto al fomento de la sostenibilidad, pidieron ubicar un camping con acceso al pantano de Bárcena, construir un embarcadero y crear un almacén de embarcaciones o establecer una oficina de turismo rural además de limpiar todo el entorno de la estación de ferrocarril debido a la existencia de toneladas de carbón sin retirar. Incluso se implicaron con la falta de médico en el municipio. Precisamente esta es la única cuestión de todas las efectuadas que ha tenido respuesta « del resto de propuestas no hemos obtenido una respuesta fehaciente de ser consideradas o al menos negociadas por parte del Ayuntamiento », afirma Fernández.
De Cubillos al mundo
Comenzaron en Cubillos, su casa, pero el trabajo de ODS podría llevar otro apellido «no lo descartamos en absoluto. Sin embargo, nuestro campo de acción prioritario actualmente es Cubillos del Sil, y más teniendo en cuenta que aún queda mucho por hacer. Pensar en abordar algo más extenso cuando todavía no se han alcanzado los compromisos ni alianzas suficientes para emprender un proyecto conjunto sería algo pretencioso por nuestra parte», apunta Fernández».2021 ha sido un año en el que ha ganado el pulso social e incluso un interés del sector privado «activo y creciente» pero «seguimos demandando un mayor compromiso por parte de este órgano con la Agenda 2030 local y con los Objetivos de Desarrollo Sostenible promovidos por ODSC».
Actuar sí o sí
Fernández reconoce que cuando es la crisis la que mueve algo, es fácil llegar tarde, por eso considera que ya no hay tiempo para entretenerse «no vale seguir pensando y actuando como veníamos haciendo. Solo basta con observar a nivel local todos los problemas que han estado presentes durante años, desde la despoblación, la desindustrialización y destrucción de empleo, hasta el abandono del medio y de sus recursos estratégicos. No tiene sentido pensar que ante este panorama desolador las cosas vayan a mejorar o resolverse por sí solas».Fernández pide un cambio de perspectiva por parte de las administraciones o «no será posible visualizar cambios sustanciales». Y el cambio que pretenden, en su año y meses de vida es «a través de la conciliación y los sistemas de alianzas para dirigirnos a un lugar mejor del que nos encontramos».