Los transportistas del Bierzo celebran San Cristóbal bajo la incertidumbre de un sector en crisis

Los transportistas del Bierzo celebran este lunes el día de su patrón, San Cristóbal, con mucha incertidumbre sobre su futuro. Piden estabilidad, económica y política, que permita dar futuro a un sector envejecido, sin relevo generacional y con muchos problemas.

El responsable de la asociación de transportistas Upatrans en el Bierzo, Juan Carlos López, apuntó que el nuevo gobierno que salga de las urnas el próximo 23 de julio mantenga las subvenciones implementadas como las bonificaciones a los carburantes, en un contexto internacional muy complicado, y las ayudas al abandono. "Esperamos que se concrete la situación de los carburantes en los mercados internacionales, que es lo que nos trae por el camino de la amargura", dijo.

En todo caso, se muestran aliviados porque, de momento, se ha paralizado la normativa que pretende modificar las masas y dimensiones de los vehículos. "Hay cuestiones con las que no estamos de acuerdo", afirmó. Esta normativa queda en ‘stand by’ hasta después de las elecciones como aumentar las toneladas que podría cargar un vehículo articulado o los metros de otro tipo de camiones.

Otro de los problemas que sufren los transportistas bercianos, y en general de todo el país, es el déficit de conductores. Según los datos aportados por Juan Carlos López, se calcula que en España faltan unos 20.000 camioneros. Y lo más graves, precisó, es que en los próximos años se jubilarán el 30 por ciento de ellos, ya que la edad media se sitúa en los 52 años.

"No somos una isla. Aquí también hay déficit de conductores. Cada vez hay menos gente que quiera sumarse al sector", lamentó. "Cuando yo empecé lo normal era encontrarse con compañeros de 20, 22, 24 años. Ahora, si tienes 40, eres muy joven", precisó. En la actualidad, hay 300 empresas y 900 camiones en el sector del transporte en el Bierzo.

Además, hizo referencia al incremento de los intereses, a la hora de pedir préstamos "De momento nos vamos manteniendo, pero no nos atrevemos a hacer inversiones. Es una incertidumbre total". A esto se suma la tardanza a la hora de comprar un camión y que llegue. "Tenemos miedo de adquirir un vehículo y que cuando llegue ya no haya trabajo", señaló.