Los agresores de la conserje del Jesús Maestro declararán con sus padres

La alcaldesa se reunirá con la dirección tras las navidades para estudiar qué medidas de seguridad adoptar, sin descartar las cámaras, aunque apunta que es un sistema complejo

Mar Iglesias
24/12/2016
 Actualizado a 12/09/2019
Manifestación en el recinto escolar donde está la casa de la conserje, el lugar donde fue agredida. | M.I.
Manifestación en el recinto escolar donde está la casa de la conserje, el lugar donde fue agredida. | M.I.
La Policía Nacional ya ha identificado a los tres presuntos agresores de la conserje del colegio Jesús Maestro del barrio ponferradino de Cuatrovientos, a la que asestaron una brutal paliza después de robarle sus pertenencias. Una vez localizados, la policía ha presentado ya la solicitud a sus familias para que declaren. Lo harán acompañados de sus padres y de un abogado y frente al llamado Servicio de Atención a las Familias. Su declaración servirá para que la Fiscalía de Menores decida qué pena solicitar por estos actos, que implican allanamiento de morada, robo y agresión.
La localización de los jóvenes, dos chicas y un chico, llegó un día después de que el barrio de Cuatrovientos saliera a la calle para manifestar su repulsa por los hechos que tuvo que vivir la conserje, que también quiso participar en los cinco minutos de silencio que quisieron dedicarle a esa protesta.

En estudio, las cámaras

El director del colegio, Jorge García pedía sistemas de vigilancia en el centro para que no pudiera ser ocupado en horas no lectivas sin control. Anunciaba una reunión con la alcaldesa con el fin de tomar medidas para que el colegio sea más seguro, incluso con la instalación de cámaras de vigilancia que solicita la asociación de padres y madres con una recogida de firmas.

La alcaldesa de Ponferrada lanzó su repulsa por los hechos «manifestamos nuestro total apoyo». Y aseguró que «habrá una reunión» con el fin deque estos actos no se repitan«apelando sobre todo a la concienciación de la gente», dijo. Al lado de la comunidad educativa «estudiaremos qué medidas pueden ser más efectivas».

No descarta la colocación de cámaras, como se solicita, aunque sí apunta que no es fácil«porque los padres deben dar su consentimiento para grabar a menores», apunta.

Reconoce que otros centros también han solicitado ese mismo sistema por problemas con la entrada a horas no lectivas en los centros, lo que ha provocado ruptura de mobiliario y pintadas.
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