Templarium culpa de esta situación a la crisis y a la falta de empleo «porque la gente no tiene dinero para gastar». Por eso la agrupación considera que el Ayuntamiento debe cambiar su estrategia de realizar planes para el comercio «y dedicarlo todo a incentivar la creación de empleo», dice otra de las comerciantes de Templarium, Fátima López Placer. Pese a que gracias a ese plan se están realizando obras de mejora y adecuación del centro de la ciudad, reconocen que esos esfuerzos no servirán si la crisis sigue viva «los jóvenes se están marchando y las empresas cierran. Así nada valdrá», auguran.
Las obras de la calle Camino de Santiago se han estirado en el tiempo, pero los comerciantes consideran que eso no les ha afectado para contabilizar una bajada tan acentuada en ventas como la que acaban de sumar en Semana Santa «las obras siempre son molestas, pero no ha sido eso. Además está justificado el retraso, porque nos han explicado que las conducciones eran obsoletas y se han encontrado más problemas de los previstos, pero además el tiempo no ha acompañado, porque ha llovido más de lo normal y así no se puede trabajar», dice Álvarez.
Los socios de Templarium esperan que se cumpla con los plazos que se han comprometido dentro del retraso «nos han dicho que las obras estarán acabadas a finales de abril y confiamos en que sea así», dice.Después se espera que se inicie la remodelación de la calle Gómez Núñez, una vena de entrada a la ciudad fundamental y que se encuentra en malas condiciones, tanto que incluso algunos comerciantes veían más prudente iniciar las obras por esa calle que por la que en la actualidad está levantada. Además, la alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo ha anunciado que la calle La Puebla tendrá «un lavado de cara» y espera que pronto se abran nuevos comercios, como le consta. La apertura del Alda Hotel, considera la regidora que será un revulsivo para la zona.
¿Propietarios responsables?
Álvarez considera que no ha calado esa realidad de que el comercio ponferradino se viene abajo como ven desde dentro los propietarios de establecimientos. «A veces no sabemos ni cómo aguantamos los que seguimos abiertos», dice López Placer. Los carteles de cierre se han reproducido en los últimos años y los locales que dejan su actividad se dejan al polvo y al olvido. Esa falta de perspectiva considera Álvarez que es la que hace que los propietarios de locales comerciales cerrados pidan rentas demasiado altas para facilitar que los emprendedores puedan recuperarlos. Por eso una de sus propuestas pasa por solicitar al Ayuntamiento que establezca medidas coercitivas a los propietarios que mantengan «en mal estado sus locales», con la imposición de multas o incluso establecer algún tipo de ordenanza que imponga nuevos impuestos a locales vacíos. Álvarez considera que sólo con una misiva explicando la situación y pidiendo que se adecenten los locales para que los turistas no sientan que la ciudad ha perdido su atractivo sería una manera, tal vez, de incitar a esa concienciación que demandan.«Las facilidades dadas a los propietariospara alquilar no han funcionado y el Ayuntamiento aquí tiene mucho que decir», pide la agrupación.
De todos modos, López Placer considera que esos pasos «son muy difíciles de dar» y reconoce que el Ayuntamiento sí se ha reunido con los propietarios de locales vacíos «aunque poco puede hacer». La voluntad de los propietarios es la de seguir demandando rentas altas por locales que están en malas condiciones y que no quieren mejorar, hasta el punto de negarse a permitir el acceso a los socios de la agrupación de comerciantes de La Puebla cuando estos decidieron proceder a la limpieza de los locales sin coste y acondicionarlos para hacerlos atractivos con exposiciones como la última sobre la Semana Santa. Por eso los comerciantes piden reflexión a esos dueños de locales y que se tomen las medidas, a nivel municipal, que puedan adoptarse para recuperar el potencial comercial.