Se dedicaban profesionalmente, de una manera jerarquizada y “con vocación de permanencia” al cultivo masivo de marihuana, reza el escrito de Fiscalía al hablar de los 15 acusados que, desde abril a octubre de 2020 estuvieron implicados en la venta de drogas desde San Miguel de las Dueñas. Ahora les pide penas de un máximo de 14 años de prisión para uno de ellos hasta cuatro años como mínimo. Todos tienen vinculaciones familiares y tenían las plantaciones en sus casas o en invernaderos propios. La estructura jerárquica con la que se movían desde la producción al mercado comenzaba por ASR, con antecedentes penales computables a efectos de reincidir en el mismo delito. Era el patriarca del clan.
Ordenaba la instalación y el abandono de las instalaciones a conveniencia. Para él se piden 14 años de prisión y multa de 246.320,80 euros, por el valor de las sustancias estupefacientes incautadas. Los agentes dieron con el clan por una plantación que tenían en San Miguel de las Dueñas, con 410 plantas cogolladas. Era una infraestructura muy preparada, con tres aparatos de aire acondicionado, nueve extractores de aire, 12 ventiladores, 43 lámparas de cultivo, 43 transformadores eléctricos…En la vivienda se detectó un enganche ilegal de corriente eléctrica con un valor de defraudación de más de 15.500 euros. Tenían varias viviendas en el Bierzo, algunas las fueron dejando al pensar que estaban localizados, y ubicándose en otras. Pero continuaron con la producción en sus domicilios. En una de las ubicaciones de cultivo llegaron a tener 233 plantas.
La red se movía con el patriarca y su esposa, sus tres hijos y parejas y siete personas más, familiares de los mismos. La mayor parte de los acusados cuentan con antecedentes penales por diferentes delitos, principalmente de tráfico de drogas o robo.
Las penas van desde los 14 años a los cuatro y las multas más altas superan los 246.000 euros cada uno de ellos. Como responsabilidad civil, el fiscal considera que los acusados deberán indemnizar, solidariamente a la empresa de electricidad por lo defraudado. El juicio debía haber comenzado este lunes en la Audiencia Provincial de León, tras una suspensión anterior, pero ha vuelto a producirse, por la incomparecencia de parte de los implicados. La nueva fecha está fijada para el 11 y 12 de noviembre. El caso procede del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 3 de Ponferrada.
Los 8 integrantes del clan familiar se encuentran en libertad bajo fianza desde junio de 2021 tras permanecer un año en prisión preventiva.
Desde San Miguel
Todo comenzó en junio de 2020, cuando la Guardia Civil, tras distintas pesquisas, entró en un vivienda de San Miguel de las Dueñas donde encontraron las 410 plantas de marihuana que permitirían generar, según las estimaciones del auto del Ministerio Público, hasta 13 kilos de cannabis. En el mercado negro, esa producción podría haber alcanzado los 19.000 euros.
Los acusados se movían si veían que podía haber sospechas sobre ellos. Así compraron dos propiedades en Cubillos y después viajaron al Órbigo. Hasta siete propiedades descubrió la Benemérita en San Cristóbal de la Polantera, Viloria de Órbigo, Castrillo de San Pelayo, Palacios de la Valduerna y Santa Marina del Rey. En ellas, tanto terrenos de cultivo como viviendas, se incautaron más de mil plantas. Se estima que la producción estaría en unos 17 kilos de cannabis y alcanzaría un precio en el mercado negro de 46.000 euros.
La Guardia Civil descubrió toda una empresa dedicada al cultivo y venta, con infraestructuras complejas y todos los elementos para contar con una buena cosecha. Ahora, los acusados se enfrentan a un global de casi 80 años de cárcel.