Tras terminar su etapa en el Real Madrid, Martínez recaló en un conjunto alfarero en el que destacó a las órdenes de Bordalás. El ahora técnico del Getafe le dio confianza desde su llegada y pasó de apenas jugar a ser importante en la primera media temporada del entrenador así como en la que completó entera en Alcorcón sumando más de 4.000 minutos entre ambas. Después, la llegada de Muñiz le apartó de los terrenos de juego saliendo primero al Numancia y después ya con destino León.
«Lo primero que dijimos en el vestuario tras ganar al Córdoba era que había que ir a Alcorcón a ganar»Ahora, el centrocampista madrileño regresará a la que fue su casa en un momento dulce. Después de apenas contar durante la primera parte de la liga, la sorpresa de su titularidad ante el Zaragoza fue una sorpresa que se ha terminado convirtiendo en habitual pasando a ser titular en 4 de los últimos 5 partidos perdiéndose uno por sanción.
«Estoy contento, echaba en falta tener continuidad y ese gusanillo de poder jugar más, ahora el míster ha decidido ponerme y creo que estoy respondiendo, pero soy el mismo que hace 6 meses, trabajo igual e intento ayudar al máximo. Todos somos importantes y hay que estar preparados porque el éxito o el fracaso es el mismo para todos», señalaba en rueda de prensa el madrileño.
Ovacionado por la grada del Reino tras su sustitución en la victoria ante el Córdoba, Martínez reconoció que el equipo «ha tenido la humildad para reconocer que hacía falta dar más y esa está siendo la clave de la reacción». Una confianza recuperada que viene «de la necesidad de encadenar varios partidos sumando, lo hemos pasado mal y no lograrlo suponía malestar e impaciencia, pero supimos traducirlo en trabajo y en creer aún más en lo que hacíamos».
Sin embargo, confesó el capitán que en el vestuario «tenemos claro que no hemos conseguido nada aún, el partido de Córdoba era importante pero si no puntuamos en Alcorcón nos metemos en un lío y queda mucho por sufrir seguramente hasta el último día», reconociendo que el estado de euforia externo «desde mi posición da miedo porque ha habido equipos que en mejor situación han bajado, quien se relaje lo va a pasar mal».
Es por eso que señaló que en el vestuario «lo primero que se dijo tras ganar al Córdoba era que había que ir a Alcorcón a ganar» en un campo que «conozco bien y que es muy difícil ganar allí, la gente sabe manejarse en estas situaciones de necesidad y hay que seguir igual porque si no tendremos muchos problemas».
El centrocampista no quiso hacer cuentas más allá de «lograr los 50 puntos lo antes posible» afirmando que «desde hace mucho solo pensamos en el partido que viene porque queda lo más difícil» y recordó que tiene contrato con la Cultural para la próxima temporada «y tengo claro que voy a seguir» dando gracias a la afición «porque sentimos un ambiente como el de este domingo de Primera» pidiendo que «nos apoyen hasta el final para mantener la categoría y soñar el año que viene con algo más bonito».