Trigueros y un desencuentro que acaba en salida

A priori, dentro de la numerosa lista de bajas que la Cultural iba a dar a final de temporada no apuntaba a estar el central Pablo Trigueros. O al menos sin apretar en busca de su continuidad, tanto por su rendimiento pese a ir claramente a menos como el resto del equipo con el paso de las jornadas, como una vez elegido que Raúl Llona fuera el técnico porque su salida de balón desde atrás se adaptaba a la perfección al estilo del nuevo entrenador.

Sin embargo, finalmente el central tampoco seguirá la próxima temporada en León y este lunes se unía ya a la larga lista de bajas oficiales del club, formada junto a él por Saúl González, Álex Blesa, Alberto Solís, Pol Ballesté, Andy Kawaya, Fran Cruz, Néstor Querol, Cristian Pérez, Antón Matthäi y Joel López, y a la que aún le quedan varios integrantes por anunciarse dado que la pésima segunda vuelta provocará un cambio masivo en el equipo.

En el caso de Trigueros, todo viene de un desencuentro que acaba en salida. Es cierto que no ha habido una oferta formal sobre la mesa del central, pero no que la Cultural no estuviera interesada en su continuidad, la cual intentó cerrar antes incluso de finalizar la temporada y llegó a su final sin que esa idea hubiese variado pese a la bajada de rendimiento del central en los últimos meses de competición.

Trigueros trasladó que su idea era valorar otras ofertas y que si nada le convencía se replantearía seguir. La Cultural decidió ante ello cerrar esa puerta De hecho, con la campaña en marcha hubo un contacto con el jugador para trasladarle su interés en que continuase, sin ofrecer nada concreto ya que al ser uno de los jugadores de caché más alto del equipo debían esperar a cuadrar los números, pero encontrando una reacción positiva que les emplazaba a conocer el nuevo proyecto y su ambición como el factor clave para continuar o no en la Cultural.

Sin embargo, en la reunión de final de temporada entre el club y el jugador, la Cultural le trasladó su interés en que siguiera vinculado al club e incluso puso sobre la mesa las cifras económicas en las que podría moverse, pero Trigueros les trasladó que su idea principal era cambiar de aires, aunque dejando la puerta abierta en el caso de que nada de lo que le saliera le convenciese a poder replantearse la situación y acabar estando interesado en ese caso en renovar.

Esa situación provocó el cambio de planes del club leonés, que decidió no esperar por el central y paralizar así una de sus apuestas económicamente fuertes de la próxima temporada al considerarse únicamente una solución de urgencia para el jugador, por lo que cerró esa puerta para no perder tiempo ni otras opciones al verse con reducidas posibilidades de éxito y ni siquiera llegó a presentar una oferta formal al jugador.

El central de 30 años cierra así la que será su única temporada en la Cultural con un balance de 31 partidos disputados, 26 de ellos saliendo como titular, para un total de 2.423 minutos en los que marcó dos goles y recibió cuatro tarjetas amarillas.