Dentro de la mala dinámica de la Cultural, el tema del gol y que está ante su peor racha de su historia en el comienzo de una segunda vuelta, las cosas por lo menos comienzan a ver la luz. Una de las fortalezas de los de Llona era la defensa, no olvidemos que la Cultural llegó a ser el equipo en España con más porterías a cero, eso sí, en la segunda vuelta se había perdido.
La Cultural pasó de ser el equipo menos goleado a ver como en cada partido a domicilio comenzaba perdiendo o incluso le caían cuatro goles como el día del Barça Atlétic, que es verdad que viene por la expulsión de Fornos, pero algunos son errores defensivos.
Echando la vista atrás la Cultural no sabía lo que era una portería a cero a domicilio desde el primer partido del año ante el Teruel, sí, el 3 de enero. Han pasado dos meses en los que el balance total de los partidos fuera de casa han sido 7 goles en contra y solo 2 a favor, pero lo de los goles a favor es otro tema.
En la segunda vuelta la Cultural no había conseguido dejar la portería a cero, además de encajar 7 goles
Rayo Majadahonda, con un despiste defensivo de Víctor García, se puso por delante en el marcador, ante el Arenteiro un balón parado que vota en el área de la Cultural antes de que Christian Santos rematase ante la floja marca de Fornos.
Después llegó al debacle de Barcelona con cuatro goles que vienen de un centro en el que Faye remata solo, el gol de Guiu con una fragilidad defensiva de Coch y Rodri, otro balón parado que remata solo Pau Víctor solo al segundo palo y el último entre rebotes y no despejar de Pau Víctor. Ante el Sabadell, más de lo mismo, centro lateral que remata Baselga entre tres defensores de la Cultural.
Bañuz, con dos paradas salvadoras, demostró, de nuevo, que sus 15 porterías a cero no son casualidad
Tajonar pintaba mal en ese aspecto defensivo por arriba, ya que los navarros son de lo mejor en el juego aéreo y directo, pero la Cultural supo contrarrestar muy bien eso y solo permitió dos tiros claro del filial rojillo, que fue cuando apareció Bañuz para salvar al equipo. El dato no era nada bueno, los leoneses encajaron en toda la primera vuelta 7 goles a domicilio, los mismos que llevan ahora en solo cinco partidos, por lo que era uno de los deberes a corregir, hasta el propio Llona lo admitió.
Todo se construye desde atrás y viendo que por lo menos en Tajonar el equipo recuperó esa solidez defensiva que durante el año tan bueno resultados le dio, lo siguiente es recuperar esa puntería arriba y generar las máximas ocasiones posibles.