Los blanquiazules no han conseguido pasar de los dieciseisavos en ninguna de las cuatro ocasiones que los han alcanzado. La primera vez que la Ponferradina consiguió colarse fue en la temporada 2008/2009. El equipo que dirigía entonces Ángel Viadero lograba, no sin sufrimiento, cruzarse con el Sevilla. Tras imponerse por la mínima (1-0) al Racing de Ferrol en primera ronda, Oviedo y Universidad de Las Palmas pusieron a prueba la templanza de los bercianos, que se imponían a los carballones en la prórroga y a los canarios en la tanda de penaltis.
La perseveranciaen las primeras fases curtió a un equipo que obligó a ponerse serio al Eurosevilla tras vencer por la mínima (1-0) en el partido de ida en El Toralín, pero no fue ventaja suficiente para conquistar el Sánchez Pizjuán, donde la lógica se impuso y el conjunto andaluz apeó a la Ponferradina por un resultado queahora parece maldito (4-0).
Y es que dejando aparte el premio que supuso cruzarse con el Real Madrid en la temporada 2011/2012, la Deportiva ha comprobado en sus propias carnes que para dejar KO a un Primera hay que rozar la perfección.
Ante el Getafe, con los blanquiazules ya en Segunda División, la eliminatoria quedó sentenciada ya en el partido de ida (0-4), mientras que el Eibar fue capaz de levantarse del 3-0 del Toralín para vengar las eliminaciones de 2009 y 2011.
Cayó la muralla
Cuatro partidos tardó a Deportiva en encajar un gol en Copa. Ni Alcorcón, ni Lugo -a pesar de la prórroga-, ni el propio Eibar en el partido de ida habían sido capaces de batir a Alberto o Dinu, pero Bastón derribó la muralla en el tiempo de descuento de la primera mitad y el equipo se desmoronó en la segunda, acusando la inferioridad numérica y sufriendo mucho por el flanco derecho, el de un Seoane que al igual que ante el Lugo, volvió a hacer aguas.
La segunda goleada en apenas cuatro días vuelve a dejar patente que la Deportiva, especialmente a domicilio, ha perdido la sobriedad defensiva de la que había hecho gala durante el primer tercio de temporada, aunque todavía es uno de los equipos menos goleados de la Liga Adelante.