Fernando Estévez y Ana Alonso cogen la delantera

La Riaño Trail Run se disputa durante el fin de semana con un recorrido muy exigente entre los pueblos de Oseja de Sajambre y Caín de Valdeón

Miguel Orejas
24/06/2023
 Actualizado a 24/06/2023
La prueba reúne a más de 300 corredores. |  Joaquín López Ferrera / TerraIncognita Sport
La prueba reúne a más de 300 corredores. | Joaquín López Ferrera / TerraIncognita Sport
Ha dado comienzo la sexta edición de Riaño Trail Run. La carrera leonesa se presenta como un auténtico reto montañero para los deportistas más intrépidos, pues sus afilados perfiles por las cumbres de la Montaña de Riaño y la Montaña Palentina no son aptos para todos los públicos.

Así, con más de 300 participantes en liza, se ha celebrado la primera jornada de la competición. Uno de los alicientes de este año era precisamente el cambio de dirección de la primera etapa, que siempre ha comenzado en Caín de Valdeón y ha finalizado en Oseja de Sajambre.

En esta ocasión el pelotón de corredores comenzó su andadura en Oseja, punto de partida de un recorrido que ofrece 36 kilómetros y 2.960 metros de desnivel positivo (más de 6.000 acumulado total). En los primeros compases el trazado asciende hacia Vegabaño pasando por Soto de Sajambre. Desde allí se conecta con la cimera del Frade, Vega de Llós y se desciende por el bosque de la Farfada hacia Cordiñanes para alcanzar el famoso mirador del Tombo.

Con las espectaculares vistas de los Picos de Europa frente a ellos, los corredores subieron por la canal de Capozo y afrontaron el posterior descenso por la canal de Mesones hasta llegar a la meta de Caín de Valdeón, pueblo de gran fama por acoger uno de los extremos de la carismática Ruta del Cares.

Como es habitual en Riaño Trail Run, el calor fue uno de los protagonistas de la jornada, con temperaturas que rozaron los 30 grados. De esta manera, la climatología endureció un trazado ya de por sí exigente por sus interminables desniveles.

Pero conscientes de que todavía quedan dos etapas por afrontar, los corredores dosificaron esfuerzos y se afanaron por alcanzar la línea de meta dentro de las 10 horas reglamentarias.

El resto de la jornada, ya de vuelta en Riaño, sirvió para recuperar fuerzas, darse una buena ducha y comer en abundancia. Riaño Trail Run es una carrera de montaña que, al ofrecer un divertido formato por etapas, el componente de la estrategia toma una gran relevancia.

Así, no basta con ser el más rápido el primer día. Es necesario administrar la energía durante los más de 80 kilómetros de recorrido que se cubren durante el fin de semana.

En ese propósito se encuentran varios aspirantes al triunfo final, entre ellos el vencedor de la primera etapa, Francisco Estévez, quien marcó un tiempo de 4:37:34 en la línea de meta. Muy cerca de él llegaron Iván Sangiao (4:41:37) y Gabriel Zarrete (4:48:39).

En la categoría femenina Ana Alonso ha logrado una seria ventaja al dominar con autoridad la etapa y parar el crono en 5:18:19, más de 40 minutos sobre Carla Junquera (6:00:37) y Julia Gracia (6:06:18).

En las modalidades por equipos, la pareja masculina más rápida ha sido el Blue Magic – Alpino Benalmádena (5:42:59), la femenina el equipo Storm (8:58:54) y en categoría mixta se ha impuesto el Team Date un Voltio – Pozik (5:40:08).
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