Dos leyendas con mil batallas y recuerdos

En la historia del balonmano español, José Javier Hombrados y Juanín García tienen sin lugar a dudas un sitio garantizado en primera fila. Pocos pueden igualar su palmarés y también sus cifras individuales, que ahora mismo sitúan al guardameta como el jugador con más partidos de la historia de la liga Asobal, al haber pasado ya de los 700, y al extremo, máximo goleador de la competición, como el cuarto que en breve será ya el segundo, pues apenas cinco partidos le saca el lesionado de gravedad Fernando Hernández y cuatro el ya retirado Gurutz Aguinagalde.

Dos leyendas con mil batallas y peleas entre ellos. Porque tras compartir vestuario durante cuatro campañas en las filas del Abanca Ademar, cuando uno tenía sólo 19 años y el otro 24, luego fueron recordados sus duelos entre Barcelona y Ciudad Real, con los títulos normalmente en juego en ellos, habiéndose reanudado sus enfrentamientos tras la llegada hace tres años de Hombrados a Guadalajara, justo coincidiendo con el regreso de Juanín a León.

Un duelo que mañana vivirá un nuevo capítulo en el Pabellón David Santamaría, donde la escuadra alcarreña recibirá al Abanca Ademar. Una nueva oportunidad de ver frente a frente a dos referencias. Un reencuentro mil veces vivido pero que sigue evocando múltiples recuerdos.

Con 24 años Hombrados y 19  Juanín se unieron en León, donde ganaron dos títulos en sus 4 campañas juntos «Siempre recordaré aquellos años en León. En ellos logramos el primer título del Ademar, que fue una Copa Asobal pero se vivió como una ‘Champions’, y se empezó a marcar una trayectoria que dio lugar al camino de éxitos del club. Creo que todo el mundo allí se acuerda de aquellos equipos porque marcaron el futuro», señala Hombrados, que sobre Juanín recuerda cómo desde el inicio vio que «era un chaval de futuro pero ya se notaba que tenía mucho talento. Se le veía, había llegado tarde a despuntar, pero Cadenas se había fijado en él. Recuerdo que compartía espacio con Benés, pero que pronto tomó el testigo y su calidad se puso de manifiesto dando exactamente igual su edad».

El meta, que bromea apuntando que «al llegar yo a León él era uno de los jóvenes y los veteranos siempre les pedíamos cosas. Ha pasado el tiempo pero Juanín aún siempre me lo comenta, que yo era el que le hacía ir a recoger los balones o traerme cosas...»; señala cómo «a pesar de los años y de que se va haciendo difícil, siempre hemos mantenido el contacto. De vez en cuando hablamos por teléfono, estamos al tanto de la vida del otro y como yo tengo lazos con León nos vemos a menudo».

Relación personal y respeto profesional, puesto que deja claro que «he estado con extremos de muchísima relevancia, pero yo creo que sin duda él está en mi ‘top3’, dándose el caso además de que la relación que nos une y la amistad le hace ser más importante».

Hombrados: «Aquel Ademar inició el camino de éxitos y marcó el futuro. Siempre recordaré aquellos años» Y es que a Hombrados, que a sus 46 años sigue marcando diferencias y siendo un ejemplo de longevidad, no le sorprendería seguir viendo más años a Juanín al más alto nivel «porque el talento es evidente que sigue y su físico, que sería el mayor problema dado que es mucho más exigente para un jugador de campo y más estando en un equipo de ‘Champions’, es prodigioso».

Unos halagos que el leonés Juanín García comparte, recordando sobre el meta cómo «a León llegó justo después de ser bronce en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, y para nosotros, que éramos unos chavalines, verles a él o a Fernando Hernández era muy importante, para nosotros fueron maestros».

Un reto enfrente cada día, en cada entrenamiento, que a Juanín le «ayudó a hacerme mejor, tanto para el portero como para los que le lanzamos el nivel del de enfrente te retroalimenta para crecer», pero que además «en el caso de Hombrados era un jugador que siempre ayudaba mucho a los jóvenes, que nos hablaba y daba mil consejos. A todos los niveles, personal y profesional, en el Ademar y en la selección, ha sido siempre un compañero de diez y uno de los mejores porteros en todos los sentidos con los que he compartido vestuario».

«Estaba siempre encima de nosotrospara echarnos una mano, integrarnos y que fuéramos uno más, que no nos sintiéramos fuera de lugar, y si tenías que llevar los balones o hacer algo pues lo hacías. Nuestras generaciones nos lo tomamos así, quizá para otras más cercanas sería de otra manera y pensarían que es por putear,pero era todo lo contrario», recuerda Juanín sobre esos primeros años en la escuadra leonesa.

Juanín: «Me hizo ser mejor. Siempre estaba encima para echar una mano a los jóvenes e integrarnos» Todas esas relaciones culminaron en dos títulos, la Copa Asobal que abrió el palmarés ademarista y la Recopa de Europa: «A partir de ahí empezaron a respetarnos más, que además éramos un equipo muy joven con mucha proyección. La base de lo que es el Ademar a día de hoy se empezó a construir ahí», recuerda Juanín.

No sería exagerado decir que sus enfrentamientos se acercan al medio centenar. Miles de veces lanzándose que hace que se conozcan a la perfección, aunque eso no está claro a quien beneficia: «Yo sé dónde me pueden venir sus tiros, pero él también sabe lo que puedo hacer. Hay una dualidad de conocimientos que marca mucho en favor de uno u otro dependiendo de los días, del estado de cada uno... pero la balanza al final acaba estando equilibrada», señala Hombrados, mientras que Juanín lo tiene mucho más claro y considera que «es más ventaja para el portero, que al final nosotros repetimos mucho los lanzamientos, haces los mismos en determinadas situaciones y un portero al que llevas tirando tanto tanto... sabe dónde vas a lanzar. Te toca cambiar cosas en esas situaciones, más con un portero como Jota que sigue siendo un pilar y uno de los mejores porteros de la liga».

Trucos y estrategias para afrontar una cita muchas veces repetida entre dos jugadores que, aunque sigan pasando los años, siguen alargando sus récords.