Cuando un equipo con problemas en ataque se mide a la mejor defensa de la liga, necesitas una chispa que rompa con lo esperado. Un mago que se saque de su chistera un truco que deje con la boca abierta al público y genere un clima favorable para el resto de artistas que hay sobre el escenario.
Y en un día clave, en un partido con sabor a ‘playoff’ y que para la Cultural marcaba la diferencia entre seguir creyendo en llegar a esa fase de ascenso o quedarse a expensas de un milagro, los leoneses encontraron a su particular prestidigitador con el 8 a la espalda.
Porque ‘Barri Potter’ agitó su varita y, a su descomunal actuación en un centro del campo que dominó a su antojo, unió dos acciones individuales determinantes que provocaron los dos primeros goles, y lideraron el triunfo por 3-0 de la Cultural frente al Nástic, a quien igualan el golaveraje colocándose a cinco puntos de él además de ponerse a sólo dos de la quinta posición.
En la primera parte Jardí tuvo un mano a mano que sacaron entre Amigo y el palo, y un gol anulado por fuera de juego
Quien hubiera dejado de creer en León, ya vuelve a hacerlo. Quien todavía mantuviera la esperanza, tiene ahora más argumentos para ello después de que Barri extendiera la fe por el Reino con dos jugadas que marcaron por completo el partido, porque dieron luz a la habitual niebla que parecen tener los leoneses cuando se acercan al área rival y necesitan transformar su dominio en oportunidades de gol.
Se acercaba a la media hora la Cultural yendo de menos a más, generando acciones de balón parado y buscando esta vez sí los disparos lejanos, pero sin inquietar a Varo. Pero a la primera acción de peligro abrió el marcador.
Recibió Barri de espaldas a 30 metros del área rival, con un control orientado espectacular se zafó de los dos rivales que le encimaban, recortó a uno de ellos cuando buscaba recuperar la posición, sentó en el suelo a otro tras pisar área y se sacó un disparo raso, potente y pegado al palo que superaba a Varo y llevaba la locura al Reino de León.
Las 3 llegadas con peligro de la Cultural fueron gol. En el 1-0 Barri recibió a 30 metros, se fue de tres rivales y marcó
No se prodiga precisamente en tantos el mediocentro, que no marcaba desde hace siete años, en la temporada 2016/17 con el Móstoles en Tercera, pero que se sacó de la manga uno de los mejores goles de la temporada, de esos que cada aficionado presente en el campo comenta al salir y que quien no lo haya visto debe perder unos segundos de su tiempo en buscar.
Pero no se quedó ahí la cosa, porque también llevó su firma la sentencia. Ahí no fue el ejecutor, pero sí de nuevo el inventor. Porque cerca del cuarto de hora de la segunda parte, cuando la Cultural que perdió a Fornos por lesión no había vuelto a llegar con peligro desde el gol, Barri recibió en la medular, de nuevo recortó con el control, y sacó la escuadra y el cartabón para colar entre defensores del Nástic un pase perfecto para la carrera de Berto, que les cogía la espalda y no fallaba en el mano a mano contra el portero, al que batía con un disparo raso cruzado haciendo el 2-0.
Ver para creer. Porque para ser justos, no era un partido para ese marcador. Es más, la fortuna que muchas veces le ha dado la espalda a esta campaña a la Cultural, le había sonreído en esta ocasión, pues como ellos a ese punto había llegado el Nástic con dos ocasiones... pero que terminaron una en el larguero y otra en gol anulado.
Berto no falló en un mano a mano en el 2-0 y Guillermo igualó el golaveraje tras un centro lateral de Calderón
Pero ahí también es de destacar la figura del portero Amigo. Al meta de 24 años se le presentaba un ‘papelón’. Sin experiencia en la categoría, de repente le ha tocado suplir en el tramo más importante de la temporada al que estaba siendo el mejor jugador de la Cultural en la temporada, Bañuz. Y no estuvo fino en el primer gol del Dépor, pero más allá de eso su rendimiento fue sobresaliente, dejando este sábado frente al Nástic dos grandes paradas decisivas.
Especialmente la primera, porque hubiera cambiado por completo el partido. Destaca el Nástic atrás pero tiene jugadores desequilibrantes arriba, dos de los cuales se juntaron para poner con el corazón en un puño al Reino. Porque a los 4 minutos Godoy dejaba de primeras un envío de Alan para Jardí (un peligro constante), que controlaba libre de marca al lado del área pequeña y, solo ante Amigo, disparaba pero veía cómo el meta se lanzaba con el cuerpo, la sacaba con los pies y tenía la suerte de que el balón golpeara luego en el travesaño y botara en la línea, sin margen para la polémica sobre si dentro o no.
Se salvaba ahí la Cultural, pero también cuando cerca del descanso el Nástic encontraba un empate que no subió al marcador. Porque en una falta colgada al área Jardí se anticipaba a la zaga y remataba al fondo de la red, pero el colegiado anulaba el tanto por un fuera de juego que las imágenes televisivas evidenciaban que existía.
Fornos se tuvo que retirar lesionado en el descanso. El árbitro 'perdonó' la roja a Godoy en la segunda parte
No fue la última que tuvo el Nástic, que en la jugada posterior al 2-0 acarició el volver al encuentro, pero Amigo se sacaba una gran mano al tiro desde la esquina del área pequeña de Jardí, tras pase de Godoy, y Álvaro tapaba el rechace en el que con el portero en el suelo Pablo buscaba el gol.
Gastó ahí su último cartucho el equipo catalán, porque tras perdonarle el árbitro la roja a Godoy por una fea y dura entrada sobre Barri, la Cultural alargaba su pleno de aciertos y convertía también en gol su tercera llegada, en la que Víctor conectaba con Calderón, este centraba al área y ahí Guillermo aprovechaba el mal despeje del zaguero para fusilar a Varo en un gol de ‘nueve’, de esos que se le piden y que ha hecho por partida doble en las tres últimas semanas. ¿Se habrá enchufado a tiempo?
Con los puntos sentenciados pero el golaveraje particular que puede ser decisivo igualado, nadie bajó los brazos pero el marcador no se movió, dejando ese 3-0 que premia a la mejor versión de la Cultural de todo el año 2024.