Bolo: "Estoy convencido de que vamos a pasar"

«Ver entrenar al equipo es una gozada, si somos capaces de trasladar eso al partido tendremos muchas opciones. Estoy convencido de que vamos a pasar la eliminatoria y a seguir adelante».

Ese era el optimista mensaje que lanzaba este viernes el entrenador de la Ponferradina, Jon Pérez Bolo, de cara al encuentro del domingo (20:00 horas) frente al Cornellá, en el cual ve fundamental «la tranquilidad, el no ponerse nervioso y controlar la ansiedad. Hay que saber que son 90 minutos, que no hay que precipitarse y que el gol puede llegar en cualquier momento. Ojalá sea lo antes posible, pero que metas muy rápido no quiere decir que pases la eliminatoria».

Y es que el técnico berciano tiene claro que aun en el mejor escenario de ponerse pronto por delante «nos equivocaríamos» buscando aguantar el 1-0 que clasificaría a la Deportiva, por lo que apuesta por «seguir igual, no cambiar e ir primero a por el segundo y después a por el tercero».

«No saben dónde vienen, van a sufrir. El público nos va a levantar cuando estemos caídos y les meterá presión» «El día mas duro tras la derrota fue el lunes, pero al final esto es fútbol y puedes caer. En nuestra mano está el levantarse, ilusionarse y volver a creer», añadía Bolo, que tiene claro que «no quiero coger vacaciones todavía. Está siendo un año precioso y ojalá que estemos un mes más aquí, luego ya tendremos tiempo de disfrutar de las familias aunque sean pocos días, pero lo que queremos disfrutar es el momento que estamos viviendo ahora».

¿Sobre el Cornellá? El entrenador berciano se espera «un equipo fuerte que nos va a poner las cosas difíciles y que tiene más registros de los que vimos en la ida. Saben jugar a fútbol y estaríamos confundidos si pensamos que sólo vienen aquí a defenderse».

De hecho, Bolo incidía en que el conjunto catalán «no sólo juega bien en su campo, también fuera, donde han cosechado pocas derrotas y plantado cara a equipos importantes y en campos parecidos al nuestro. Haciendo las cosas bien pasaremos, pero no tenemos que fiarnos». Eso sí, con respecto a la ida Bolo espera un choque con «menos balones divididos y disputas, en el que se va a jugar más por abajo que por arriba» y en el cual para su equipo «la intensidad debe ser innegociable».

¿Un factor diferencial? Confía en que sea el público, recalcando que «el primer gol lo van a hacer ellos, ya no cuando pite el inicio, sino en el ambiente de la ciudad desde primera hora del domingo que será espectacular. Eso nos va a ayudar y nos va a llevar en volandas».

«Nos equivocaríamos buscando aguantar un 1-0. Si cae habría que seguir igual e ir a por el segundo» «Es once contra once, pero está claro que el rival va a notar la presión si hay 9.000 personas apoyándonos, porque el que diga que no la nota miente», añadía Bolo, que incide en que «van a estar animando pase lo que pase hasta el final, nos van a levantar cuando estemos caídos y a ellos les caerá presión extra.No saben dónde vienen, vienen al Toralín y van a sufrir».

De ahí viene parte de su confianza, pero también del rendimiento del equipo en sus últimos encuentros en casa. «Más que por los resultados por las sensaciones que ha dado, nos vemos con fuerzas y muchas ganas», señalaba un Bolo que resaltaba que en su plantilla «ahora mismo todos están bien, hasta Yac ya va a tener en breve el alta», no dando pistas sobre la alineación titular puesto que «tenemos muchas posibilidades y, si bien es cierto que últimamente jugamos con un once muy definido, buscaremos la mejor por opción para esta eliminatoria».

Nadie quiere que mañana se acabe la temporada para la Ponferradina. Y en el peor escenario, el de un adiós, Bolo lo tiene claro y lanza un mensaje sobre su futuro: «Ojalá podamos estar juntos mucho tiempo, estoy muy a gusto aquí».