Bembibre sorprende al Girona y deja a tiro la permanencia (62-72)

David volvió a vencer a Goliath. Regresó el mejor Bembibre. El Embutidos Pajariel, que tras un arranque meteórico, vivía tiempos complicados y solo había ganado uno de sus siete últimos partidos, consiguió en la cancha del vigente campeón un triunfo (62-72) que puede valer una permanencia.

Y es que además de poner tierra de por medio con la zona de descenso -tres victorias de ventaja sobre el Campus Promete- las de ‘Chiqui’ Barros se reencontraron con su mejor versión.

El parón copero solo le sentó bien a las visitantes. El Girona, que se colaba a última hora en la lucha a cuatro, dejó patente que no dar la talla en el torneo del ‘KO’ puede haber sido la puntilla, a nivel anímico, de una colección de estrellas que todavía no ha aprendido que en el baloncesto las guerras individuales no llevan a buen puerto.
Desde el primer minuto, la sintonía de Bembibre contrastó con la anarquía local. Mckinney se vistió de estrella, pero estuvo siempre bien acompañada por Laura Herrero, Jovana Vukoje y Anna Gómez, menos eficientes de cara al aro rival, pero importantes para encarrilar el choque.

Girona solo resistió el primer cuarto. Las del Bierzo Alto terminaban el primer período con solo un punto de ventaja (16-17), una ventaja mínima que después de las derrotas en los últimos desplazamientos, permitía soñar que la machada era posible.

La utopía cristalizó en el segundo cuarto. Las bercianas no tuvieron piedad. Mckinney hizo y deshizo a su antojo en ambas zonas, liderando también una defensa que recordó a aquella que deslumbró durante los primeros compases de temporada. Las de ‘Chiqui’ Barros crecieron secando a las gerundenses. Solo Givens (24) mostró algo de lucidez en el apartado ofensivo, pero su exhibición no sirvió de nada. Salvo en el último cuarto, con el partido ya sentenciado, el equipo bembibrense no hizo más que ampliar una ventaja que llegó a ser de 18 puntos nada más empezar el los últimos diez minutos (39-56). Las locales aprovecharon la lógica relajación de las de ‘Chiqui’ Barros en los últimos compases del choque para maquillar el resultado final (62-72) que refleja la superioridad de las rojillas.

Mckinney, con 25 puntos y 30 créditos de valoración, fue la mejor jugadora rojilla y confirmó que el Embutidos Pajariel no se equivocó al ficharla en el mercado de invierno. Junto a la norteamericana, los trece puntos de Vega Gimeno y los once de Vukoje también fueron clave de una victoria que encarrilla la permanencia.