Villaquilambre impulsa la madera como opción de futuro industrial

El Ayuntamiento pretende reunirse con propietarios de terrenos aprovechables para sembrar chopos para que conozcan un negocio ideado para Villaquilambre

Sergio Jorge
08/01/2017
 Actualizado a 18/09/2019
Los chopos podrían utilizarse para comercializar madera de calidad, aunque para ello se requiere una gran inversión. | DANIEL MARTÍN
Los chopos podrían utilizarse para comercializar madera de calidad, aunque para ello se requiere una gran inversión. | DANIEL MARTÍN
El Ayuntamiento de Villaquilambre ha dado un paso adelante en su proyecto de generar empleo y mejorar el medio ambiente en el municipio con la biomasa como motor económico. Y es que el concejal de Promoción Industrial, Miguel Ángel Díez, convocará durante las próximas fechas unas reuniones con los propietarios de terrenos que están en desuso actualmente, así como con todos los interesados en esta iniciativa, para explicar cómo se puede desarrollar este negocio que tendría como objetivo «impulsar la actividad productiva y económica», según el edil de UPyD, que lleva más de tres años planificando esta idea. Es por tanto una manera de realizar «un sondeo» entre los habitantes del municipio.

La opción más viable, pero también la que más tiempo requiere, es usar chopos para madera de calidad  El proyecto se basa en aprovechar los terrenos del municipio para plantar diferentes tipos de árboles para luego utilizarlos como material para biomasa o, de forma más eficiente, para madera de calidad. Una iniciativa que supone implicar a la propiedad privada, pero que sería liderado por el Ayuntamiento de la localidad del alfoz y que requeriría también de subvenciones de otras administraciones para así facilitar la adquisición de herramientas y otras necesidades y la preparación del terreno.

Y es que Díez diferencia entre secano y regadío como posibilidades para materializar este proyecto. Si se trata de la primera opción, el edil apunta que «sería óptimo para la producción de especies autóctonas como el roble o el pino, perfectamente adaptadas a las condiciones climáticas y edafológicas».

«Desde un punto de vista meramente económico, el cultivo de estas especies sólo se puede concebir como inversión de futuro, pues el crecimiento de estas plantas es de ciclo largo; sin embargo la rentabilidad paisajística y medioambiental, aparentemente no tangible, sería muy considerable, sin olvidar los puestos de trabajo que se crearían para el acondicionamiento, plantado y mantenimiento de las superficies arboladas», añade Díez.

Haría falta esperar cerca de 15 años, y una importante inversión, por lo que podría entrar una empresa externa  En cuanto al regadío, la iniciativa del Ayuntamiento de Villaquilambre se basa en que los terrenos «presentan expectativas diferentes», ya que se podría poner en marcha «producción en ciclos cortos (tres años) y de madera de calidad en ciclos a medio plazo (doce o trece años)».

Ahí es donde entra en juego el chopo, ya que existen «condiciones climáticas y edafológicas adecuadas», además de que no se requiere una inversión inicial cuantiosa y que «la cosecha de la primera plantación no requiere destoconado pues del tocón se selecciona el brote más vigoroso, pudiendo repetirse durante cinco cosechas», es decir, durante 15 años. También considera los beneficios mediambientales y la mejora paisajística de los entornos utilizados.

Díez advierte de que para lograr materializar esta iniciativa se requiere «un mínimo de hectáreas», por eso sería imprescindible la unión de varios propietarios y, si no tienen capacidad de inversión, podría entrar una empresa «y luego repartir los beneficios».
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