Silván: "León ofrece alternativas 365 días al año y los turistas tienen que saberlo"

Entrevista al alcalde de León sobre la oferta que la ciudad presenta desde este miércoles en Fitur

Alfonso Martínez
23/01/2019
 Actualizado a 19/09/2019
Un instante de la entrevista con el alcalde de León, Antonio Silván, para analizar la oferta turística de la capital en Fitur. | SAÚL ARÉN
Un instante de la entrevista con el alcalde de León, Antonio Silván, para analizar la oferta turística de la capital en Fitur. | SAÚL ARÉN
Este miércoles arranca la Feria Internacional de Turismo (Fitur) y por eso el alcalde de León, Antonio Silván, analiza la oferta de la ciudad y hace balance de la capitalidad gastronómica, que mañana finaliza con el acto para el nombramiento oficial de Almería.

– ¿Qué quiere vender León en Fitur?
– León. Seguir vendiendo, promocionando y proyectando la imagen de León. Los valores turísticos que tenemos son múltiples: históricos, culturales, gastronómicos, arquitectónicos y de gentes, porque los propios leoneses son un valor. Queremos seguir difundiendo León, que hoy es más conocido que hace un año y que hace dos o tres años. Eso es indudable.

– ¿Cómo se traduce eso en datos?
– En un incremento de visitantes y, lo que es más importante desde el punto de vista de la actividad económica, de pernoctaciones, porque eso significa aportación al comercio y eso eleva el gasto que los visitantes hacen en la ciudad. En cuanto a viajeros, entre 2012 y 2014 tuvimos 1.124.991. Mientras, entre 2015 y 2017, la cifra subió a 1.295.716. El incremento es del 15%. En las pernoctaciones hemos pasado de 1.842.091 a 2.176.363. Esto representa un 18% más. Son datos que reflejan que León es más conocida y que es más atractiva. Y Fitur, escaparate nacional e internacional, es una herramienta fundamental.

– ¿Cuáles son las novedades de este año en la oferta de León?
– Le vamos a dar una configuración más amplia. Hemos destacado hasta ahora la realidad turística de nuestro Camino de Santiago, de nuestros monumentos, de nuestra gastronomía, teniendo en cuenta la capitalidad, pero este año queremos trasladar la realidad arquitectónica con el León de Gaudí. Vamos a establecer y vamos a proyectar la ruta del modernismo en la ciudad. Gaudí como representante emblemático, pero también una serie de edificios, casi 40, que reflejan la realidad arquitectónica de la ciudad, además de nuestra historia romana y medieval, nuestra historia reciente con el Musac… Vamos a suscribir un convenio con Renfe para establecer descuentos y tarifas más económicas. Además, vamos a ir bajo el paraguas de la marca de Castilla y León, dentro de la estrategia de turismo de interior de la Junta. Hay otro punto importante, que León se va a incorporar a la Red de Destinos Turísticos Inteligentes. Vamos de la mano de Segittur y estamos a punto de cerrar la primera fase para determinar todos los perfiles que significa el turismo en León y todas las proyecciones comerciales, congresuales… Otro dato que refleja la evolución en positivo de León es el número de congresos, jornadas y eventos que ha tenido León en estos últimos años y que demuestran que la ciudad ha acertado apostando por un sector importante de actividad económica. Entre 2011 y 2014, hubo 19.941 participantes en 159 eventos de negocios. Entre 2015 y 2018 la cifra ha ascendido a 28.887 participantes en un total de 204 eventos. El incremento es de un 44%. Es algo muy importante.

La ciudad ha atraído a casi 29.000 viajeros desde 2015 gracias al turismo de negocios
– Los fines de semana la ciudad está prácticamente llena. ¿Es ahora el reto lograr que venga más gente el resto de los días gracias a ese turismo de congresos y al Palacio de Exposiciones?
– El reto es ser todavía mucho más atractivos y desestacionalizar la llegada de visitantes a León. Tenemos esa oportunidad, porque León es 365 días de alternativas y los turistas tienen que saberlo. Lo que queremos es que esos congresos sean un elemento, pero también queremos que el resto de días de la semana haya gente. Los congresos se están colocando normalmente en jueves y viernes o lunes y martes para favorecer que se aproveche el fin de semana anterior o posterior. Todo eso es tremendamente atractivo y que nos hayamos colocado bajo el paraguas de Ifema va a ayudar. Primero a dar a conocer y luego a atraer. ¿Por qué Ifema eligió León? Por muchas cuestiones, pero entre otras muchas por la alternativa que ofrece León y que no tiene Madrid. ¿Cómo? Hay que tener en cuenta que Madrid ofrece multitud de cosas, pero siempre urbanas. León tiene lo urbano paseable y disfrutable, pero al lado tenemos también lo medioambiental, lo cultural, lo histórico, lo gastronómico… Cuando hablamos de congresos, no se trata sólo de reuniones, sino también del complemento a esas jornadas de trabajo. La semana pasada se estaba ya planificando un congreso médico nacional de atención primaria que va a haber en marzo, pero también habrá uno internacional con más de mil participantes que está previsto para el próximo año. Es un activo que tenemos que potenciar.

– Y al Palacio de Exposiciones, el Auditorio y todos esos atractivos paralelos de la ciudad se ha sumado la llegada del AVE…
– Estamos a dos estaciones de metro de AVE, como dicen los madrileños. Y es verdad, venir de Madrid aquí son dos horas cómodas y tranquilas, dos horas que te permiten leer y charlar sin cansarte. Uno puede llegar a León por la mañana o a mediodía, disfrutar de la ciudad también por la tarde y por la noche y al día siguiente regresar. O a los dos días. Lo que tenemos que conseguir es que el periodo medio de estancia se incremente. Pero esto no es fruto de la casualidad, sino de un trabajo que no produce resultados inmediatos. Esto es una lluvia fina de difusión, de proyección y de conseguir que los operadores turísticos se fijen en nosotros y que a través de los medios de comunicación y las redes sociales seamos más conocidos… Antes de ir a un sitio, miramos en internet lo que vamos a ver. Si es atractivo, lo cogemos. Hace dos años hubo en León un congreso de la mayor asociación española de operadores turísticos. A raíz de aquello y de otra serie de eventos, hemos ido colocando León como destino y nuestros profesionales del sector han salido de y se están extendiendo a otras zonas de España, y muy especialmente a Madrid, para vender sus productos. El Camino de Santiago también es importante. Vamos a tener el Jacobeo en 2021 y estamos trabajando a través de la Junta y de la asociación de municipios. Y ello no significa exclusividad de un sector económico, pero tenemos que darnos cuenta del potencial turístico que tiene León, que antes estaba ladeado. Tiene que ser un sector más, junto al tecnológico, al biofarmacéutico, al logístico, al agroalimentario… El turismo es uno más y ahí están los datos de empleo. Somos la única capital de la comunidad con dos estrellas Michelín. Potenciemos eso, porque tiene un efecto de arrastre. León es además una ciudad cómoda para pasear y la gente que viene vuelve.

La capitalidad ha proyectado nuestra gastronomía, que hasta ahora estaba un poco arrinconada– ¿Qué valoración hace de la capitalidad gastronómica que mañana termina?
– Muy positiva. En primer lugar, porque la ciudad está viva y la gastronomía ha contribuido a ello. En segundo lugar, porque hemos trasladado un mensaje de que la unión da resultado. La unidad de todas las instituciones en torno a un sello de calidad y de excelencia como es la capitalidad, la unión de los productores con los profesionales de la hostelería… Ha sido fundamental. La capitalidad ha supuesto además una herramienta de difusión formidable. No tendríamos capacidad ninguna para realizar una campaña de comunicación tan potente como ha sido la capitalidad, que ha aparecido en todos los medios de comunicación nacionales y en algunos internacionales, como 'The Guardian', 'The New York Times', 'Financial Times', televisiones francesas y portuguesas… Hemos conseguido tejer la Red de Capitales Españolas de la Gastronomía para que aprovechemos el tirón del sello no sólo en el año en el que nos corresponde. El 2018 ha sido una meta volante que hemos pasado, pero queremos seguir pedaleando. También hay un elemento que yo valoro mucho pese a ser intangible. Es la autoestima de los leoneses. Mucha gente ha venido a conocer algo que nosotros sabíamos que teníamos. Han venido, lo han saboreado, lo han disfrutado y se han quedado con ello. León les gusta. Su gastronomía les gusta, pero también pasear por sus calles, ver sus edificios, comprar en sus comercios… El balance es positivo y esto no deja de ser una palanca de futuro. Tenemos que seguir trabajando y hemos demostrado que con un proyecto válido hemos conseguido un buen resultado. Tenemos que seguir, pero ahora es cuestión de todos, no sólo de las instituciones. Es cuestión de los profesionales, de los hosteleros, de los operadores de turismo, de los hoteles… Es cuestión de todos. Tenemos una marca, ‘León, Manjar de Reyes’. Tenemos que seguir potenciándola para mejorar aún más en calidad y alcanzar la excelencia. Algunos ya la tienen y otros van camino de ella.

– Hay nuevos proyectos hoteleros y de restauración de alta calidad. ¿Habría que intentar llegar a los más modestos con esta apuesta por la calidad?
– Confiamos en que haya un efecto cascada. Cada uno tiene que tener su propia esencia, pero van evolucionando. No es lo mismo entrar en los sitios hoy que hace un año o hace tres. Y esto es así estén donde estén. Cada uno tiene su propia personalidad y hacen bien en mantenerla, pero hay que saber mejorar. Creo que es un reto que todos tenemos. Vamos a lanzar una app de formación para la hostelería, para que todos los profesionales sean los mejores embajadores de León. Si le va bien al vecino, me va bien a mí. Puede ser competencia, pero también es ayuda. Y quien lo quiera ver en negativo, que lo vea, pero creo que muchos lo han visto en positivo. De hecho, este año va a haber muchos establecimientos, hoteles, bares y restaurantes de gran nivel que se van a abrir en nuestra ciudad. Y eso significa que el mensaje ha calado y que la capitalidad gastronómica ha merecido la pena en términos económicos, de atracción de visitantes y de difusión de una realidad que estaba un poco arrinconada pese a que todos sabíamos que somos unos privilegiados de tener lo que tenemos. Y han tenido que venir de fuera a decírnoslo.
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