Reunión preparatoria para un tradicional duelo dialéctico

Se acerca la tradicional fiesta de Las Cabezadas y el Ayuntamiento de León cumplió este martes con el primer acto que marca el protocolo. La corporación municipal y el Cabildo se dieron cita en San Isidoro en una reunión preparatoria de cara al duelo dialéctico que protagonizarán el domingo 24 la concejala de Bienestar Social y Juventud, Vera López, y el canónigo Luis García Rodríguez. «Han venido a pedir la autorización correspondiente para que un año más se cumpla con la fiesta popular de San Isidoro, que en nuestro pueblo y en nuestra ciudad se conoce con el nombre de Las Cabezadas», aseguró el abad, Francisco Rodríguez Llamazares.

La fiesta se autorizará «con sumo gusto», avanzó Rodríguez, pero hizo hincapié en que «como todas las cosas importantes –y esta lo es para el Cabildo y para la historia de la ciudad– hay que prepararla debidamente». Por eso elogió el «buen criterio» del Ayuntamiento a la hora de dar el primer paso y, «con mucha educación y respeto», haber presentado su intención de «celebrar esta fiesta y de pedirnos permiso». Tras esta reunión se fijará otra de vuelta en la que será el Cabildo el que se desplace al Ayuntamiento. En este caso para darles el consentimiento o el consentimiento «con condiciones» para que se pueda llevar a cabo.

A la espera de esta próxima cita y con la mirada puesta, sobre todo, en el día 24, el abad de San Isidoro ya advirtió que el Cabildo estará muy bien representado en Las Cabezadas. Lo hará «por un canónigo, el más jovencito que tenemos, que se ha tomado con tanto interés la celebración de este acto que se ha ido a la montaña leonesa, ni más ni menos que a la zona de Riaño, y allí está entre montañas y cerquita de la nieve preparando el acontecimiento», dijo. Su nombre es Luis García Rodríguez y él será el que tratará de convencer al Ayuntamiento de que la ofrenda que llevará al santo –de un cirio de una arroba y dos hachas de cera– es en realidad un tributo.

Frente a él la concejala Vera López defenderá la voluntariedad del gesto que cada año se lleva a cabo en agradecimiento a que tras un periodo de sequía y después de una rogativa al santo en 1.158, «la lluvia cayó con abundancia sobre los campos de León y su alfoz», como así se recoge en el ‘Chronicon Mundi’ de Lucas de Tuy.

López, que remarcó que ella no ha podido prepararse como su oponente, apuntó que aunque la historia dice que esta ceremonia –también conocida como ‘Foro u oferta’– suele acabar en tablas, ella va a «hacer todo lo posible para que en este caso la corporación municipal salga como vencedora», porque «nunca se sabe cómo pueden acabar las cosas». En todo caso, sí que remarcó que para ella es «un placer y un orgullo poder representar al Ayuntamiento de León en un acto tan emblemático y tan representativo de nuestra ciudad. En algo histórico, tradicional y un acto precioso», dijo. Además, avanzó que en su intervención «puede haber alguna sorpresa» que no quiso desvelar porque «las sorpresas si se cuentan dejan de serlo».