Tres personas se sentarán en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial de León este miércoles, 6 de marzo, por un delito de lesiones agravadas y otro leve de lesiones. El primero de ellos se atribuye solo a uno de los encausados, para el que el fiscal pide una pena de siete años de prisión. Mientras, considera que los otros dos son «autores» del segundo de los delitos y les solicita por ello dos meses de multa con una cuota diaria de diez euros.
En sus conclusiones provisionales la Fiscalía señala que en la madrugada del 13 de octubre de 2019 dos de los acusados estaban en un bar de Astorga al que acudió el tercero. Allí se produjo una discusión por un altercado previo entre uno y el hermano de otro y, una vez en la calle, se inició una pelea en la que «se propinaron puñetazos». Uno de los acusados golpeó con un vaso en la cabeza al otro y regresó al bar, aunque la pelea continuó en una calle cercana. En ella, uno dio «fuertes puñetazos» en la cara a otro, «cayendo este al suelo y golpeándose la cabeza».
Como consecuencia de la agresión descrita, el que cayó al suelo sufrió diversas lesiones, como una herida inciso-contusa, un traumatismo craneoencefálico que le causó una hemorragia, contusiones, hematomas, agitación psicomotriz y también vio afectadas varias de sus piezas dentales. Ingresó en la UCI y requirió atención de neurocirugía entre el 13 de octubre de ese año, 2019, y el 8 de noviembre. A continuación, se le derivó a otra clínica, donde también estuvo hospitalizado hasta el día 12 de noviembre. Además, necesitó tratamiento psicofarmacológico y de logopedia. Tardó en curar 551 días, según el escrito del fiscal, de los que 15 se consideran de perjuicio muy grave, 16 de perjuicio grave y 520 moderado. También le quedaron secuelas como la alteración de las funciones cerebrales, un trastorno neurótico y disartria postraumática con valoración conjunta de 27 puntos. La atención prestada ocasionó unos gastos al Sacyl de 23.198,64 euros.
Por su parte, el acusado al que se atribuye esta agresión presentaba una contusión, rozaduras en ambas manos y una herida en un hueso de una de ellas. Solo necesitó una primera asistencia y tardó en curar ocho días, todos ellos de perjuicio «exclusivamente básico» y sin que le hayan quedado secuelas. Los gastos ocasionados al Sacyl fueron de 73,75 euros.
Para el fiscal los hechos descritos constituyen un delito de lesiones agravadas, del que considera autor al que propinó los golpes al herido más grave y otro leve de lesiones que atribuye a los otros dos. Por ello pide una pena de siete años de cárcel al primero y dos meses de multa con cuota diaria de diez euros a los otros dos. Subraya también que el primero debe indemnizar a esta persona en 35.000 euros por las lesiones y en 20.000 euros por las secuelas, así como al Sacyl, en este caso en los 23.198,64 euros en los que se valoró la atención médica prestada. A los otros dos acusados les pide que indemnicen de forma conjunta y solidaria al primero de los acusados en la cantidad de 250 euros por las lesiones que le produjeron y a Sacyl en los 73,75 euros que costó su asistencia.