Luz y espectáculo para la noche más mágica

A bordo de tres coches clásicos los Reyes Mayos llegaron este martes al Ayuntamiento de San Marcelo. A punto de comenzar la cabalgata, cientos de niños se agolpaban frente al viejo Consistorio para saludar de cerca a sus majestades. «¿Os habéis portado bien?», les preguntaron al bajar de los vehículos. A su paso causaron sensación entre los más pequeños, que miraban con admiración a los Magos de Oriente mientras buscaban con sus manos los caramelos que repartían los pajes.

A las puertas del edificio el alcalde y varios concejales esperaban para recibirles. En un abarrotado salón de plenos, Antonio Silván les dio la bienvenida a León y les agradeció que en una noche tan ajetreada hayan hecho un alto en la ciudad. «Los niños leoneses se han portado muy bien, que me lo han dicho los pajes», advirtió. Por este motivo, consideró que todos ellos son «merecedores de todo lo que traéis en vuestros cofres», trasladó a los Reyes. Como alcalde, lanzó además otra petición, que desde el lejano Oriente traigan «paz, tranquilidad, estabilidad, solidaridad y trabajo para todos aquellos leoneses que no lo tienen».

Apelando a su «inteligencia y sensibilidad» Silván, también reclamó a Melchor, Gaspar y Baltasar que traigan carbón, «pero carbón del bueno para los leoneses de nuestras cuencas mineras». Un carbón que, según dijo, «a veces es dulce y otras amargo, pero que queremos aquí».

Antonio Silván pidió paz y trabajo para los leoneses y también «carbón del bueno para las cuencas» También Gaspar se dirigió a todos los niños que esperaban para saludarles. En nombre de los tres, el Rey Mago recordó a los presentes que el año pasado León les había pedido «un tren» y se lo trajeron y , ahora, con la Alta Velocidad ya en la ciudad, están dispuestos a seguir cumpliendo deseospara todos y a intentar que no falte el trabajo y la industria en esta tierra.

A punto de despedirse para dar inicio a la cabalgata, Gaspar deseó a todos feliz noche de Reyes. «Dormid bien y mañana abrid vuestros regalos», pidió a los niños antes de advertirles de que habían llegado cargados con muchas de sus peticiones, pero que otras no habían podido cumplirlas animándoles así a mantener la ilusión un año más.

Antonio Silván entregó a los Reyes un pin conmemorativo de la ciudad de León y les alentó a que en 2017 vuelvan a la capital «cargados de ilusión y regalos». Ya en la cabalgata más de 300 figurantes y 11 carrozas desfilaron por la ciudad arrancando la sonrisa de niños y mayores. Se repartieron más de 4.000 kilos de caramelos aptos para celiacos y varias compañías de primer nivel ofrecieron un espectáculo con variedades de circo, funambulismo, monociclo y otras disciplinas. No faltó de nada en una cabalgata pensada para sorprender y disfrutar y para devolver la ilusión a los niños.