León se levanta contra el machismo

No se recordaba en León una manifestación tan multitudinaria. Evocaban los presentes la del 4 de mayo de 1984, se acordaron de las protestas mineras, del 11-M, pero no, ninguna tan numerosa como la de este jueves para reivindicar una igualdad de hecho entre hombres y mujeres para conmemorar el 8 de marzo. León no miró ayer al cielo, salió a la calle sin pensárselo dos veces para rechazar el machismo en una protesta pacífica, sonora, enérgica, combativa y decidida a ser sólo el comienzo de una lucha que parecía aletargada.

‘Si nosotras paramos, se para el mundo’, ‘Estamos hasta el culo de tanto machirulo’ o ‘Vivas, libres y unidas’, fueron sólo algunas de las decenas de consignas que corearon o exhibieron en pancartas las miles y miles de personas que desbordaron este jueves el recorrido de la manifestación.

Una manifestación que fue el cierre a una jornada llena de actos para reivindicar una igualdad efectiva en un 8 de marzo sin precedentes, al menos inmediatos, en cuanto a respuesta social. Las mujeres han dicho ‘basta’; basta a las desigualdades en las nóminas por desempeñar los mismos puestos de trabajo, basta a la exclusión de las mujeres de los puestos de responsabilidad, basta a los comentarios machistas socialmente admitidos, basta a considerar la conciliación familiar propiedad exclusiva de ellas, y basta a las muertes por violencia de género y a cualquier acto encaminado a menospreciar a la mujer por ser mujer. «Somos iguales», se dijo este jueves en un buen número de actos, una frase que debería quedar impresa en las calles, en los centros de trabajo y en los hogares para tenerla presente todos los días del año hasta no tener que dedicar un día entero a concienciar sobre un derecho reconocido en la Constitución española.

Las ansias de igualdad se vieron este jueves en las calles y plazas. Por la mañana, en la plaza de Botines confluían los distintos colectivos que se movilizaron por la lucha feminista, entre ellos el colectivo de #lasperiodistasparamos, un buen número de mujeres profesionales de los medios de comunicación se sumaron a la concentración y apoyaron las reivindicaciones en cuanto a la brecha salarial, el acoso sexual y los techos de cristal, para un sector en el que «el 75 % de los puestos de poder son ejercidos por los hombres».

El colectivo destacó «la relevancia social del periodismo y, por eso, mostramos preocupación por la visión parcial de la realidad que tantas veces se da en los medios y en la que falta la presencia de aportaciones de las mujeres».

Mesas informativas, concentraciones sindicales y actos en las instituciones, primero en el salón de plenos de la Diputación provincial, donde ante la presencia de autoridades, trabajadoras y trabajadores y el colectivo de mujeres cultivadoras de lúpulo de La Bañeza se leyó el manifiesto reivindicativo de la igualdad. Lo leyó la diputada Manuela García, la única mujer del equipo de Gobierno provincial y una de las dos que integran esta corporación, lo que pone de manifiesto lo necesario del día de ayer. Tras el acto en Diputación, los presentes se trasladaron a la plaza de San Marcelo para sumarse a otra concentración, la convocada por la Concejalía de Igualdad y el Consejo Municipal de Igualdad, donde se volvieron a escuchar las reivindicaciones que tanto sonaron y resonaron con la esperanza de que salten del papel a la realidad.

El primer paso será que un día después se siga hablando de las mujeres y de su lucha y que cada uno, en su ámbito, aporte su granito de arena por la consecución de un derecho, el de la igualdad, hasta hacer montaña. Somos iguales.