La Policía maneja la hipótesis del accidente como la "más probable" en la desaparición de Denise

La desaparición de Denise Pikka Thiem, también conocida como Arizona, sigue siendo un misterio. A pesar de ir encontrando nuevas pistas sobre el recorrido que la peregrina norteamericana realizó hasta que se perdió su rastro el pasado 5 de abril, los esfuerzos tanto policiales como civiles siguen sin obtener resultados sobre su paradero. Tras hacer una batida por la zona del Camino de Santiago desde Hospital, localidad en la que la mujer se alojó poco antes de su desaparición –concretamente en el hostal ‘Don Suero de Quiñones’, hasta Astorga, la Policía Nacional y la Guardia Civil se movilizaron peinando sin éxito ayer la zona del Camino de Santiago desde la capital maragata hasta El Ganso, ya que la última información confirmó que la mujer sí llegó a Astorga y se alojó en el albergue de peregrinos San Javier, la noche del 4 al 5 de abril.

Algunos testigos afirman que la mañana siguiente Arizona fue vista en la terraza de un bar cercano a la Catedral, en compañía de un hombre italiano de unos 60 años de edad. Incluso compartieron unos minutos de charla con ella. En esa conversación, según los testigos, Denise mostró su intención de ir a la misa de las once en Astorga, para después continuar su camino hacia El Ganso, que sería su siguiente etapa. Esa información concuerda con el correo electrónico que envió la desaparecida a una amiga británica en el que le informaba de su ubicación y de estos mismos planes.

La afirmación del hombre italiano también ha sido corroborada a este periódico por otro peregrino, Javier, que compartió parte de su ruta -que estaba llevando a cabo con su hija y sus sobrinos- con Arizona. «Conocí a Denise siete días antes de que desapareciera y dejamos de vernos en Mansilla de las Mulas. Era una persona muy prudente e inteligente. Sabía hasta dónde llegaba y dónde no, por lo que es muy poco probable que se despistara o cometiera alguna imprudencia. Tenía problemas en los pies, por lo que solía hacer medias etapas, y si no podía lo organizaba todo perfectamente para arreglarse», señala este ya amigo de Denise, que fue el primero en denunciar su desaparición, junto con Cedric, el hermano de la desaparecida. «En el momento en el que le perdí la pista contacté con otra peregrina y me dijo que le había dicho que había conocido a un italiano», señala Javier, que reconoce que «lo único que se sabía de él fue por su perfil de Facebook».

La Policía ya está tras la pista de George, el nombre del italiano, para obtener más información que ayude a encontrar a Arizona. La descripción del hombre es que mide 1,70 metros de altura, tiene barba canosa y coronilla. Los testigos aseguran que utiliza dos bastones de senderismo.

Pero no sólo los cuerpos policiales ni su familia, sino también muchos voluntarios astorganos, que pusieron en marcha una partida de búsqueda colaborando en todo lo posible para encontrar a Denise Thiem, una mujer «espectacular, con la que coincidimos en varias ocasiones y con la que mantuvimos una gran relación, tanto yo como mi hija y mis sobrinos, que le cogieron mucho cariño porque era encantadora», sostiene Javier. Más de 30 personas participaron en esta partida, en la que, según la agencia Ical, también estuvo Cedric.

Las líneas de investigación policial no descartan un posible accidente, de hecho es la hipótesis más «probable» que barajan, aunque el hermano de Denise sostiene no descartar ninguna posibilidad.

La labor de búsqueda continúa y cualquier información sobre Arizona puede comunicarse a través del teléfono 987616091, el correo electrónico help.denise.now@gmail.com o la página de Facebook ‘Help Us Find Denise’, y llamando a los cuerpos de seguridad.