La Diputación invertirá 10 millones en el nuevo Plan Especial de Residuos Inertes

Incluye una partida de 4 millones en las cuentas de 2017 para construir centros de recogida de escombros en los pueblos y eliminar cientos de basureros incontrolados de la provincia

Susana Martín
15/12/2016
 Actualizado a 09/09/2019
En Cabreros del Río ya disponen de un centro de recogida de escombros desde hace dos años.
En Cabreros del Río ya disponen de un centro de recogida de escombros desde hace dos años.
Diez millones de euros para hacer desaparecer los cientos de escombreras incontroladas que se encuentran esparcidas por la provincia. Es la cuantía global aproximada del nuevo Plan «a dos o tres años» que pondrá en marcha la Diputación, con una partida de 4 millones de euros en los presupuestos de 2017, tal y como anunció este miércoles el presidente de la institución provincial, Juan Martínez Majo.

Se construirán pequeñas ‘estaciones de depósito’ en los pueblos que lo soliciten a través de sus ayuntamientos A través del Plan Especial de Residuos Inertes, la tarea de la Diputación consistirá en construir pequeños centros de recogida de escombros en todos los pueblos  que lo soliciten a través de sus ayuntamientos. Recintos sencillos –una alambrera, una puerta y hormigón– que costarían entre 8.000 y 10.000 euros, según Majo, lo que supondría una inversión total en la provincia leonesa que ronda los 10 millones de euros.

Son todavía demasiados los vecinos que hacen obras en casa y se acercan al pueblo vecino a dejar allí los restos. Cambian el baño, o reparan la cocina, y su ocurrencia es deshacerse de todos esos desechos en las riberas de los ríos o en cualquier lugar donde puedan arrojarlos sin ser vistos... El objetivo de este ambicioso Plan es eliminar los cientos de basureros incontrolados que hay esparcidos por la provincia. «Más de 350», dijo el presidente de la Diputación, aunque los alcaldes de los ayuntamientos aseguran que «se cuentan por muchos cientos».  La institución provincial se ocupará del 80% de la financiación de los recintos. El resto, los ayuntamientos En los últimos años, los ayuntamientos encuentran cada vez más dificultades para dar una solución al problema de la gestión municipal de escombros y restos de obra, aunque la competencia es municipal y hasta existe una responsabilidad penal. Con este Plan, la pretensión de la Diputación es –cuenta Majo– «ayudar en esta tarea a los ayuntamientos y a sus pueblos». Por ello, el presidente tiene previsto dirigirse a todos los ayuntamientos por escrito para darles a conocer esta nueva iniciativa e indicarles que la institución provincial acometerá las obras de estos pequeños habitáculos receptores de escombros en todos los pueblos que lo soliciten. La financiación correrá en un 80% a cargo de la Diputación; el resto, los ayuntamientos.¿Qué llevaría a algún pueblo a rechazar que se instale uno de estos recintos hormigonados? No es tan sencillo como decir sí a la Diputación. Una vez construidos los habitáculos, son los ayuntamientos los que han de hacerse cargo de cargar los residuos y llevarlos a un centro de reciclaje. Así lo cuenta Matías Llorente, diputado y alcalde de Cabreros del Río, que construyó una estructura así en su pueblo hace ya dos años. El centro de recogida de escombros de Cabreros, costó 12.000 euros, tiene unos 150 metros cuadrados y los vecinos tienen que pedir autorización para utilizarlo, para poder llevar un cierto control y que no se lleven escombros indiscriminadamente. Lo único que no se puede depositar allí es tierra, madera y uralita, y suelen sacar de allí uno o dos camiones de escombros al mes, que van a parar a un centro de reciclaje de Santas Martas. «Es un acierto, funciona muy bien para pequeñas obras y demás», reconoce Matías Llorente, que hasta este miércoles no tenía ni idea de la intención de la Diputación de ‘copiar’ su idea y hacerla extensiva a todos los pueblos de la provincia.Por otra parte, la Junta –a través de convenios que ultima con la Diputación– clausurará todas las escombreras de León y de la comunidad.
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