El Banco de Tierras eleva su presupuesto a 100.000 euros y recupera 745 parcelas

El Consejo Comarcal del Bierzo y la Diputación de León firmaron este viernes la renovación del convenio de colaboración para impulsar el Banco de Tierras, que desde su puesta en funcionamiento en el año 2013 ha recuperado 745 parcelas que se encontraban en desuso o barbecho.

Con este acuerdo, el Banco de Tierras pasará a tener un presupuesto de 100.000 euros al año, una cuantía con la que ambas instituciones esperan poder mediar en la adjudicación de 1.600 parcelas. Para el presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo, esta iniciativa supone una «buena oportunidad» para que los jóvenes emprendedores puedan entrar en un sector «al alza» y que considera que debe «empujar la economía berciana» ante el «retroceso» en el carbón.

Por su parte, el presidente del Consejo Comarcal, Gerardo Álvarez Courel, destacó la importancia del aspecto formativo. Courel recordó que desde que el Banco de Tierras echara a andar en 2013, más de 400 personas han pasado por los talleres de empresas y sellos de calidad que colaboran con el Consejo, tratando de que los adjudicatarios de las explotaciones «estuvieran al día de las últimas técnicas en apicultura o fruticultura».

El presidente también puso énfasis en la necesidad de seguir trabajando para la fomentar la comercialización de los productos -actualmente hay acuerdos con diez puntos de venta- y atender la demanda de los transformadores. «Este año en concreto se necesitaba mayor producción de pimientosy el banco de tierras fue una herramienta fundamental para atender el aumento de la demanda», apostilló.

Courel recordó además que el proyecto es «una idea pionera» que poco a poco se ha ido poniendo en marcha tanto en otras provincias de Castilla y León como en toda España. «Se han llevado a cabo iniciativas similares en Ciudad Real, Ronda, Córdoba o Valladolid», señaló.

Año a año, el Consejo Comarcal ha conseguido incrementar el número de parcelas recuperadas, superando algunas «reticencias y recelos» de algunos propietarios, que veían en el Banco de Tierras una especie de expropiación encubierta.

En 2013 se adjudicaron 115 terrenos en desuso, una cifra que se elevó hasta los 176 en 2014. En los dos últimos años, el Banco de Tierras ha superado la intervención las 200 intervenciones. En 2015 se recuperaron 234 parcelas y en lo que va de 2016 ya se han cedido 220 terrenos.