Cocemfe y Aler solicitan mejorar la salud de las personas con discapacidad

Proponen diez puntos a implementar que compartirán con la Consejería de Sanidad

07/04/2024
 Actualizado a 07/04/2024
Un momento del paseo saludable de León. | Mauricio Peña
Un momento del paseo saludable de León. | Mauricio Peña

Cocemfe Castilla y León, la Confederación de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad, ha elaborado junto con Aler una serie de peticiones relacionadas con la mejora de la salud y la atención sanitaria de las personas con discapacidad física, orgánica o con enfermedad crónica.

Reivindicaciones que la entidad considera "fundamentales" y que, coincidiendo con la celebración del Día de Salud, quiere hacer visibles ante la sociedad de forma general y que hará llegar, de manera particular, a la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León para que puedan convertirse en realidad.

Estas propuestas se enumeran en diez puntos. Piden mayor participación del paciente en el sistema sanitario; prestaciones ortoprotésicas más orientadas a las personas; la ampliación del cribado neonatal, así como la humanización de los espacios para los menores y una mayor especialización de los profesionales en el tratamiento de las enfermedades raras; equipos multidisciplinares que contribuyan a la mejora de la atención al dolor crónico; atención sociosanitaria en el medio rural, enfocado en los cierres de los centros de salud y las diferencias interterritoriales; y la contratación de suficientes profesionales sanitarios.

Asimismo, solicitan la humanización de los cuidados en aspectos como la escucha activa al paciente con el tiempo, la información y la atención necesarias, la formación especializada de los sanitaros en el manejo de pacientes con discapacidad física y orgánica, y el acceso por parte de las entidades de Parkinson de Castilla y León a un especialista de referencia evitando "desplazamientos innecesarios". El octavo punto hace referencia a la detección temprada en enfermedad renal; el noveno urge la implantación de una tarjeta sanitaria referente; y, finalmente, proponen personalizar el formato de atención a las mujeres y niñas con discapacidad, según las necesidades de cada paciente, formar al personal de enfermería en la detección temprana de indicadores de violencia, mejorar la estructura con recursos materiales y humanos para la prevención y atención a víctimas de violencia y reforzar el equipo de pediatría para que, ante la percepción del riesgo de que una niña con discapacidad pueda estar viviendo una situación de violencia, se inicie el proceso de denuncia con parte judicial.

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