La jornada de este domingo sirvió en La Bañeza para recordar tiempos pasados gracias a la carrera del carnaval, un evento a modo de yincana pensado para recordar con mucho humor las escenas vividas hace décadas, durante los tiempos de prohibición, y en la que este año participó un número menor de carnavaleros que en otras ediciones.
La misión de los participantes en esta carrera es escapar de la autoridad, salvando las pruebas y obstáculos existentes entre la antigua estación de tren y la Plaza Mayor, convirtiéndose en una de las actividades más curiosas del programa con sorteo de disfraces al final en el que se recuerda que antaño llegaban a la ciudad muchos visitantes a través de la línea férrea para conocer o disfrutar de las complicadas ‘fiestas de invierno’.
Por la tarde, durante cerca de tres horas y desafiando a la lluvia tuvo lugar el primero de los tres desfiles de carnaval que se celebran en estos días de mascarada, recorriendo las calles de la ciudad para lucir por última vez los disfraces que los grupos idearon para salir el año pasado el lunes y el martes de carnestolendas. Ainara Miguélez, Musa del Carnaval 2023, se despidió de su reinado abriendo el desfile en una carroza acompañada de su grupo, Los Mojaos. Además, durante toda la jornada tuvo lugar el II Encuentro internacional de batukadas Ciudad de La Bañeza.