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Y todo por un simple cartel

22/06/2015
 Actualizado a 16/09/2019
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Enorme y quizás excusada pataleta, pero con una original y obligatoria propuesta alternativa la que ha surgido entre los detractores de la imagen publicitaria de las fiestas de San Juan y San Pedro de este año. León no es el primer lugar donde se difunde un cartel que no gusta a una amplia mayoría ni tampoco será el último sitio donde se elige por concurso o se contrata un diseño que multiplica los enemigos antes de salir de la imprenta.

Por eso creo que la convocatoria virtual para elegir un cartel «no oficial» pero con agrado popular, aparte de activar el ingenio amateur, es un precedente a imitar para evitar que a un diseñador que hizo su trabajo con la mejor intención le caiga una tormenta de críticas, quizás porque no se entendió bien su idea, o tal vez porque era realmente malo; quién sabe, porque sobre gustos…

En La Bañeza, con un carnaval de Interés Turístico Nacional, hemos tenido este problema muchas veces. Incluso convocando un concurso del que son jurado «expertos» del diseño gráfico, la fotografía o la comunicación, cuando a los periodistas nos han pedido elegir. Una vez, al ver que al común de los vecinos les importaba más el cartel que el dineral que se gasta en fiestas o si hay ‘mordida’ de por medio, propuse que se hiciera una exposición y votara la gente. Más votos, el ganador; cien por cien democrático y garantía de que un simple cartel no será el centro de atención del evento. Concejales: ahí queda la idea.
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