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"Vibradores con pates"

05/03/2017
 Actualizado a 14/09/2019
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La verdad es que ir al fútbol en Asturias, Mieres incluido, te reconcilia con el insulto con gracia, alejado de los torpes gritos de grupos ultra anclados en la falta de imaginación.  

Fue la nuestra Cultu a Mieres. Jugaban dos de esos equipos que están en la memoria de las gentes del fútbol por sus nombres, el Caudal y la Cultural, tal vez por ello insistían en llamarnos la Leonesa de Castiella. Toma recibimiento.

La verdad es que me fueron a tocar detrás los de más retranca asturiana, a todo le sacaban punta: «Igual andan algo bajos de forma, porque estos tendrán que hacer el ramadán para no enfadar al oro de Qatar».

- Quién se lo iba a decir, con lo normales que parecen en las piscinas de Pola de Gordón.

- Como le regalen al jequemorciechas de Matachana se prepara muy gorda.

Pero lo peor fue cuando salió la Cultural —para ellos La Leonesa de Castiella—con la segunda equipación, de un rosa que parecían espejos itinerantes al sol de Mieres. Pero ésa es una figura muy literaria, ellos le buscaron pronto otra comparación menos luminosa: «Mirailos, mirailos, ¿nos vos parecen vibradores con pates?, ¿no le harían un descuento al jeque en el pedido del sex-shop y cogió les camisetes en el lote?».

La verdad es que la Cultural tiene una puesta en escena algo abusiva para Mieres y varios miembros del banquillo lucen un pomposo y enorme Staff en la espalda. El más metido en barriga cervecera de ellos fue expulsado y tuvo la pena de paseíllo ante el sanedrín astur: «MoviStaff, menos tapas en el Húmedo, que se te transparenta la almóndiga».

Pero lo peor lo guardaban para el posible penalty final, que ellos lógicamente vieron clarísimo. ¿Qué cantaban? «¿Manos arriba esto es un atraco?»o «Así, así, gana...?» no, ni mucho menos, se arrancarona coro con un «¡¡¡Puerto de Pinos, ye de Mieres!!!», «¡¡¡Puerto de Pinos, ye de Mieres!!!»...

Lo bueno que tienen es que se les pasa pronto.Veinte minutos después toman sidra en una terraza y te llaman a voces: «Cazurro, toma un culín, que se te pase el disgusto de los vibradores con pates»
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